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Entrevista | Embajador de Venezuela en España

«En Venezuela todos tenemos que sentarnos para buscar soluciones pacíficas»

  • Antonio Ecarri representa en España a la única Presidencia de Venezuela reconocida por la comunidad internacional, que es la que ostenta Juan Guaidó

  • ​El Debate ha conversado con el embajador para conocer tanto la situación que se vive dentro del país caribeño como la que atraviesan el más de medio millón de venezolanos residentes en España

Hace 20 años el régimen implantado por el teniente-coronel Hugo Chávez comenzó a gobernar un país con fuertes contradicciones internas, pero que en su conjunto era una democracia relativamente próspera. En la actualidad, Venezuela ha generado la mayor crisis migratoria vivida en los últimos 200 años de Historia Contemporánea de Hispanoamérica.

Nuestro entrevistado, Antonio José Ecarri Bolívar, conoce perfectamente esta situación; es profesor universitario, abogado y político. También es el embajador de la República Bolivariana de Venezuela en España. Designado en 2019 por la Asamblea Nacional y el presidente (E) Juan Guaidó, Ecarri explica para El Debate con una mezcla de realismo y esperanza la situación de los venezolanos; de los que siguen allí y de los que han viajado hasta España en busca de una vida mejor.

De Venezuela han salido seis millones de personas por el empobrecimiento masivo y la violencia. ¿Qué perspectivas de futuro ve al régimen?

–Es mucho menos sólido de lo que la gente imagina. Allí, por dentro, hay una procesión seria.

¿A qué se refiere?

–Dentro del régimen hay mucha gente, sobre todo los jóvenes, que saben que no tienen futuro. Muchos han obtenido recursos y quieren disfrutar de ellos, pero no pueden salir porque tienen una situación complicada por las sanciones internacionales; especialmente, por las sanciones de carácter personal.

¿El fracaso histórico servirá para que los dirigentes renuncien a su ideología?

–Si predomina el sector que percibe que hay que quitar la losa ideológica, es posible que haya conversaciones que produzcan un cambio electoral pacífico y democrático.

Es necesario que entre en el juego una buena parte de lo que fue el chavismo, y que ya se han dado cuenta de que ha sido un fracaso terrible

¿Y si predomina el ala dura?

–Si predomina el sector que hace negocios ilícitos, el que participa en el tráfico de drogas, entonces en Venezuela no habrá salida por la vía democrática.

¿Será posible un reencuentro de las dos Venezuelas?

–Es necesario que entre en el juego una buena parte de lo que fue el chavismo, que se han dado cuenta ya de que ha sido un fracaso terrible. Además, el que haya pensado en ganar la Presidencia de Venezuela, de alguna manera debe de tender puentes con el chavismo.

«Los muertos son quienes nos gobiernan. Mira, hombre, cómo nos imponen su voluntad. ¿Quién ha hecho las leyes? ¡Los muertos!». M. Davisson Post. 'Uncle Abner' / Hugo Chávez abrazando a Fidel CastroAFP

Puentes con el post-chavismo

¿Por qué?

–Porque el presidente del año 2024 se va a encontrar con una Asamblea Nacional, un Poder Judicial y un Ejército en buena parte chavistas. Tiene que haber puentes. La presión internacional tiene que llevar a que todos se sienten para buscar soluciones de manera pacífica.

¿El presidente de 2024 será Juan Guaidó?

–El presidente Guaidó aspira a ser candidato, pero en este momento está inhabilitado. Por eso, son necesarias conversaciones que presionen para que sean habilitados todos los posibles candidatos presidenciales y los partidos políticos.

El régimen tiene el rechazo del 90 % de la población. En el momento que haya elecciones libres, no tenemos duda de que habrá un cambio de Gobierno en Venezuela

Los últimos rumores apuntan a que dentro de la oposición existe cierta división.

–La oposición venezolana, como demócrata que es, tiene diferencias, que se discuten, debaten y hacen públicas. Las diferencias públicas no ocurren dentro del régimen, que oficialmente tiene una sola voz.

¿Hay desánimo en la oposición?

–Las cosas no suceden hasta que suceden. El proceso está siendo difícil y lento. Pero creemos que la única manera de salir es que se avance en conversaciones serias para que haya elecciones libres.

¿Con qué apoyo social cuenta en la actualidad el régimen?

–Tiene un rechazo del 90 % de la población. En el momento que haya elecciones libres, habrá un cambio. Todas las encuestas reflejan la impopularidad del Gobierno de Maduro. Esperamos que la comunidad internacional esté muy pendiente para que de nuevo no sea conculcada la decisión democrática con algún zarpazo dictatorial.

El Embajador Antonio Ecarri, durante su entrevista en la sede de El DebatePaula Argüelles

Petro y Maduro, Colombia y Venezuela

Gustavo Petro, el nuevo presidente de Colombia, avanza en su proceso de normalización de relaciones con Venezuela, que estaban rotas desde 2019. ¿Supone darle un balón de oxígeno a Maduro?

–La relación entre Colombia y Venezuela es muy estrecha. Entre el año 1819 y 1830 formamos un único país. Lo mismo ocurre con nuestras fronteras. Había una relación muy estrecha, a la que se siguió un hecho perturbador, que fue el cierre de fronteras durante siete años.

La presencia de guerrillas colombianas en territorio venezolano supone otro hecho perturbador.

–Tanto las FARC como el ELN han estado instaladas allí, en Venezuela, durante muchos años, y todavía cuentan con un refugio que les sirve de retaguardia para su lucha armada.

Tenemos un gran agradecimiento a España, porque fue el primer país europeo que no reconoció las últimas elecciones de Maduro

Y la nueva relación que pretende establecer Petro, ¿suma o resta?

–Si sirviese para lograr la pacificación de Colombia, esto, de alguna manera, ayudará también a Venezuela, porque la retaguardia de la guerrilla sería eliminada y no tendremos dentro de nuestro país a sus grupos armados.

El canciller de Venezuela, Carlos Faría, y el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, durante su encuentro en Nueva York el pasado 21 de septiembreTwitter

Pongamos la vista en España. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, se ha reunido en Nueva York con su homólogo venezolano, Carlos Faría. ¿Cómo valora la relación que está teniendo el actual Gobierno de España con el régimen venezolano?

–Tenemos un gran agradecimiento a España. Fue el primer país europeo que no reconoció las últimas elecciones de Maduro y, al mismo tiempo, el español fue el primer gobierno europeo en reconocer al gobierno interino de Venezuela. Hasta ahora esto se mantiene.

¿El Gobierno de España hace todo lo posible para que Venezuela regrese al campo democrático?

–España ha acompañado a la Unión Europea en la presión para que haya elecciones libres en Venezuela. Oficialmente no se reconoció la elección de Maduro y oficialmente se reconoció al presidente Guaidó. Si hay alguna relación entre el Gobierno de España y el régimen de Maduro, no la conozco.

El Embajador Antonio Ecarri durante un momento de la entrevistaPaula Argüelles

Una diáspora variada

Aquí viven medio millón de venezolanos. ¿En qué situación se encuentran?

–En España tenemos una diáspora variada. Hay una pequeña minoría con recursos económicos que ha visto en España una posibilidad y han realizado inversiones cuantiosas. Pero la gran mayoría son gente trabajadora.

Por primera vez en su historia, ha dejado de ser un país de inmigrantes para convertirse en un país de emigrantes.

–Los jóvenes venezolanos no ven futuro y buscan otros países. España es una prioridad para muchísima gente, y no solo por el idioma, sino por la relación histórica entre pueblos.

¿Cuál es su perfil laboral?

–Son gente trabajadora y, además, cualificada. En este momento, en España hay más de 5.000 médicos venezolanos con especialidades y más de 5.000 ingenieros. El resto también son gente cualificada. Mucha gente del sector petrolero se ha venido a España: técnicos, mecánicos, electricistas, etc.

Los emigrantes venezolanos en España son gente trabajadora y, además, trabajadora cualificada

¿Cuáles son las principales dificultades que afrontan los migrantes venezolanos en España?

–Uno de los problemas más serios es la demora en los procesos de permiso de trabajo. Nosotros agradecemos que no se expulse a la gente que llega, pero hay una contradicción dialéctica; se permite que la gente esté aquí, pero no se les da o se les demora el permiso de trabajo. Así se convierten en una carga para el Estado español. Una de las exigencias que siempre hacemos a las autoridades españolas es la de aligerar los permisos de trabajo.

El proceso de convalidación de títulos, ¿cómo les afecta?

–En el caso de los médicos, es un proceso muy relevante, dado que España necesita muchos médicos especialistas, puesto que hay un déficit en el sector sanitario. Como le dije, aquí hay más de 5.000 doctores, de los cuales la mitad ya han resuelto sus problemas, pero hay más de 2.000 médicos cuyos procesos de homologación se están demorando, aunque agradecemos también al Gobierno de España su preocupación en este tema.

Tengo entendido que un problema incluso más serio que el específico de los odontólogos.

–Hemos llegado a oír decir al presidente del gremio en España que no iban a aceptar a los odontólogos venezolanos, que están muy cualificados y generalmente vienen con especialidades. Confiamos que el Ministerio de Sanidad y de Universidades se involucren en el tema.

Los que están en esa situación no pueden trabajar y, cuando trabajan, lo hacen en condiciones deplorables, porque un médico especialista –por ejemplo, un ortodoncista– termina trabajando como ayudante, ganando salario mínimo. Es la persona más cualificada de su clínica y resulta que trabaja como ayudante de los otros odontólogos, siendo él el que realiza la operación. Lo mismo sucede con las enfermeras y enfermeros venezolanos, que también hay muchos en España.

Grupo de venezolanos huyendo por la zona selvática de frontera hacia Colombia. Muchos ponen rumbo a EE.UU.

La ayuda de España

¿Qué ha hecho el Gobierno de España al respecto?

–A través del BOE ha salido una resolución según la cual el médico especialista que ha solicitado formalmente el reconocimiento de su especialidad puede, en el ínterin, ser contratado por las comunidades mientras espera al reconocimiento de la especialidad.

En el caso de que le fuese negada, el especialista tendría que cursar su especialidad en España. Y si se le reconoce, entonces los contratos a tiempo determinado se convierten en contratos a tiempo indeterminado, y entran definitivamente a la Seguridad Social.

El Estado venezolano ha dejado de pagar a los jubilados sus pensiones

Los jubilados venezolanos se encuentran en una situación difícil.

–Tenemos un drama muy serio con esto. El Estado venezolano ha dejado de pagar a los jubilados sus pensiones. En algunas comunidades españolas ha habido auxilios por razones de edad. Les entregan algún subsidio.

Esta es una cuestión que le seguimos planteando al Estado español. Hay un antiguo convenio binacional entre Venezuela y España en relación al tratamiento recíproco de jubilados y pensionados. Por supuesto, resulta necesario el cumplimiento del Estado venezolano, pero, ya que no lo ha habido, busquemos alguna fórmula que ayude a esta gente para que puedan vivir de manera autónoma.

El embajador Antonio Ecarri, en la sede de El DebatePaula Argüelles

Esfuerzo y eficacia

¿Cómo se sienten tratados los venezolanos por los españoles?

–Tengo experiencia de visitas oficiales a las comunidades de España. Afortunadamente, la gente siempre nos habla bien de la inmigración venezolana.

La memoria de los españoles es positiva. Ellos fueron a Venezuela en la época dura, después de la guerra civil y la Segunda Guerra Mundial, y no solamente fueron recibidos con los brazos abiertos, sino que también prosperaron

Tienen fama de trabajadores.

–Por ejemplo, estuve en el País Vasco, y el lehendakari Urkullu me felicitaba durante una entrevista que mantuve con él. Lo empresarios vascos le pedían su intermediación para exigir al Gobierno de España que aligere los permisos de trabajo a los venezolanos. Son gente muy eficiente y no quieren perderlos.

Creo que en España la afinidad y la simpatía hacia la comunidad venezolana son los sentimientos predominantes.

–La memoria de los españoles es positiva. Ellos fueron a Venezuela en la época dura, después de la guerra civil y la Segunda Guerra Mundial, y no solamente fueron recibidos con los brazos abiertos, sino que también prosperaron.