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La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso

La izquierda aprovecha la huelga de sanitarios para desgastar el Gobierno madrileño mientras Ayuso lidera las encuestas

La presidenta se enfrenta a momentos complicados: los médicos de Atención Primaria han anunciado que se suman a la huelga

La izquierda ha encontrado el hilo del que tirar para intentar desestabilizar a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. El PSOE, Más País –y Más Madrid en la región– y Podemos se han aunado para atacar a la líder del Gobierno madrileño cuando las encuestas le ofrecían mejores datos. La razón: el gran problema al que se enfrenta el Ejecutivo madrileño, que tendrá que afrontar la huelga de sus sanitarios que no están de acuerdo con las condiciones de reapertura de 80 centros de urgencias.

Lo cierto es que la reapertura de los Servicios de Urgencias de Atención Primaria que quedaron cerrados durante la pandemia para reubicar los esfuerzos ante la situación, le están suponiendo un grave problema al Gobierno de Ayuso.

Mientras, la presidencia denuncia que sobre este asunto existe un «activismo político» y que la izquierda usa la sanidad «porque se está hundiendo y utilizan estos centros, no para poner propuestas, no para ayudar, sino que intentan poner su pancarta para hacer algo que es insensato porque no va en contra de mí sino de los ciudadanos».

Una de las más duras contra Ayuso ha sido la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, que ha rechazado la opción de atención por videoconferencia: «Lo que propone es que en vez de atenderte un equipo con celador, enfermera y médico, te atienda una televisión y un plasma».

Atrás no se han quedado desde el propio Gobierno central. Este mismo martes, aprovechando la rueda de prensa del consejo de ministros donde la ministra Carolina Darias ha comunicado que el Ejecutivo había decidido realizar una nueva inyección económica para el Sistema Nacional de Salud, Darias se ha sumado a los ataques contra Ayuso.

La ministra ha lamentado que Madrid sea la «antítesis» del resto de comunidades autónomas, que están incrementando las plazas ofertadas. «Llama muchísimo la atención que una de las especialidades sanitarias sea Familia y Comunitaria, justo el conflicto que estamos llevando aquí (en alusión a la Comunidad de Madrid), y cómo hay un esfuerzo de todo el Sistema Nacional de Salud sin precedentes de incrementar las plazas de Familia y en cambio Madrid es todo lo contrario», ha añadido. «¿Alguien entiende que siendo Familia y Comunitaria una de las especialidades más deficitarias Madrid vaya a la contra? Ha dejado 37 plazas que podía haber ofertado», ha lamentado.

Mientras, desde la Comunidad de Madrid defienden que llevan denunciado «desde hace meses» que el mayor reto al que se enfrenta el Sistema Nacional de Salud es la falta de profesionales. Según denuncian, los médicos más necesarios son los de familia y los pediatras y no existe «compromiso ninguno» para solventar esta situación.

Un problema que irá a peor

Según las cifras que maneja la Comunidad de Madrid, en los próximos 10 años, se prevé una pérdida de más de 6.000 facultativos por jubilación, de los 17.000 existentes. Este número supone el 35 % de la plantilla actual de la región. Ocurre lo mismo con enfermería, donde sus previsiones les indican que, de las 22.000 que prestan servicio en la actualidad, se jubilarán más de 5.000. Es decir, un 23 %.

En este sentido, aseguran que las medidas anunciadas este martes por el Gobierno no suponen una mejora. «El Real Decreto aborda asuntos de mejora de la formación, que en estos momentos no es en sí un problema ya que la formación sanitaria en España es un referente mundial. Es decir, el Real Decreto se centra en la calidad de la formación, que ya es excelente, y no en la cantidad, que es donde existe el déficit», han criticado.

A seis meses de las elecciones

La sanidad ha sido uno de los temas de referencia en los que se ha basado la izquierda para atacar al Partido Popular. No únicamente a nivel autonómico sino también nacional. La colaboración público privada que defienden los gobiernos populares ha sido interpretada como el «desmantelamiento de la salud pública».

Ahora, a unos meses de la celebración de los comicios y con una Ayuso que lidera las encuestas, PSOE y Podemos han aprovechado la complicada situación con los centros de urgencias para reavivar los enfrentamientos entre sanitarios y Ejecutivo madrileño.

Por el momento, la Comunidad se ha ofrecido a volver a negociar con los profesionales de la salud, pero los trabajadores mantienen la huelga ante su disconformidad con el plan de Ayuso acerca de la reapertura de los SUAP.