Fundado en 1910

Exclusiva

Marlaska no mantiene un solo agente en el puesto de Melilla donde ocurrió la tragedia pese al aumento de nuevos intentos

El Debate ha sido testigo de la ausencia de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la valla donde tuvo lugar la catástrofe humanitaria

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, no tiene a ningún agente ni de la Policía Nacional ni de la Guardia Civil en el puesto fronterizo donde ocurrió la tragedia del 24-J. Sin embargo, desde Interior reconocen en un informe sobre inmigración ilegal que los intentos de salto han aumentado un 12,6 % en el último año.

La valla que separa España y Marruecos en el Barrio Chino tiene dos demarcaciones. Por un lado la zona de tránsito, en la que hay ubicadas dos garitas de color blanco que son usadas por agentes de la Policía Nacional. Por otro lado se encuentra el perímetro de la valla, que corre a cargo de la Guardia Civil. El Debate ha pasado dos horas en este escenario, una zona de seguridad, siendo testigo de la ausencia total de agentes.

Las garitas de la Policía Nacional en el puesto fronterizo están desiertas de personalEl Debate

Durante ese tiempo, el interior del puesto fronterizo estaba totalmente vacío. Tras pasar la verja que separa la carretera ML-105 de Melilla encontramos una pasarela de diez metros de longitud. Al fondo están las dos garitas completamente deshabitadas. Antes de acceder a ellas hay una sillas y un taburete con las patas oxidadas también vacío. Fuera del recinto tampoco hay personal de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Antes de llegar a la frontera, en un lateral de la carretera, hay una pequeña esplanada de tierra junto a dos cubos de basura destinada a ubicar coches de la Guardia Civil, que también está despejada.

El trabajo de los agentes de la Policía Nacional es controlar la documentación de los inmigrantes que acceden al territorio español. Comprueban que cumplen los requisitos y tramitan su acceso al país. Paralelamente, desde la Benemérita vigilan a las personas que se acercan al alambrado que separa Europa de África. Mientras que en el lado español, a día de hoy, no hay un sólo agente de la autoridad fijo, Marruecos sí dispone de varios efectivos militares por la zona.

Si bien el puesto fronterizo del Barrio Chino está cerrado desde el 12 de marzo de 2020 como consecuencia de la pandemia del coronavirus los intentos de salto no han hecho más que crecer. Este periódico también ha tenido acceso a un informe de Interior sobre inmigración irregular que detalla nuevos intentos masivos de asalto desde Marruecos a Melilla.

Informe sobre inmigración ilegal en España en 2022El Debate

El documento asegura que hubo 1.155 personas que accedieron a España a través de Melilla de manera ilegal en 2022. Una cifra que supone un 12,6 % más de los inmigrantes que entraron a Melilla en 2021, que fue de 1.026 personas.

La cámara clave

El pasado lunes, El Debate desveló en exclusiva la existencia de una cámara de seguridad en territorio español que fue testigo de la muerte de los inmigrantes. Sin embargo, desde el Ministerio del Interior sostienen que ese dispositivo estaba apagado el día en el que se produjo la catástrofe humanitaria alegando «que el puesto fronterizo estaba cerrado desde hace dos años». En cambio, esta afirmación no ha sido refrendada mediante ningún documento oficial.

Esta cámara de seguridad está colocada a cinco metros del patio donde ocurrió la tragedia. El dispositivo es un dispositivo Hikvision modelo HWP-N5225IH-AR y está instalado encima de la antesala donde se apilaron los cadáveres. Concretamente, entre una chapa azul y un alambrado verde pegado a una de las garitas de la Policía Nacional.

Cámara de seguridad del puesto fronterizo de MelillaEl Debate

El artefacto está anclado a una plataforma vertical, su visor es controlado de manera remota y puede girar 360 grados, lo que permite que la cámara tenga una imagen panorámica completa de todo lo que registra. Este modelo tiene un alcance de 150 metros y permite hacer hasta 25 ampliaciones de zoom. Así que, de haber registrado lo que ocurrió no solo se podría determinar si hubo muertos en territorio español, sino que, además, se visionaría si, como apuntan las investigaciones de la BBC, la Policía de Marruecos trasladó cadáveres de inmigrantes fallecidos de Melilla al lado marroquí.

El pasado 7 de noviembre, el conjunto de diputados que conforman la Comisión de Interior de la Cámara Baja viajó hasta el puesto fronterizo del Barrio Chino, donde ocurrieron los hechos, para inspeccionar la zona y ver las cintas de las cámaras de seguridad. El ministro Marlaska, en el punto de mira por este asunto, fue quien autorizó que vieran el material que registró un helicóptero y un dron de la Guardia Civil y las tres cámaras de seguridad fijas que sí están operativas. Nada de lo que registraron estos aparatos ha podido determinar hasta el momento si hubo o no muertes en territorio español.