Un TC fuertemente dividido retrasa al lunes la decisión sobre la reforma de Sánchez para controlar el Poder Judicial

La «complejidad» y «relevancia» de un pronunciamiento que alterará irremediablemente, y pase lo que pase, el futuro del Poder Judicial en España, ha llevado al Constitucional a posponer hasta el próximo lunes día 19 su decisión sobre la reforma legal del Gobierno que, vía enmiendas, trata de hacerse con el control de la Corte. El nuevo recurso de amparo planteado por Vox, en línea con el ya interpuesto por el Partido Popular que ha acelerado el Pleno extraordinario de hoy, y los escritos planteados por el PSOE y Unidas Podemos para personarse en un «expediente que todavía no está admitido», creando un «absurdo procesal sin precedentes que debería haber sido rechazado de plano», han sido clave para el aplazamiento, según apuntan a El Debate fuentes próximas al cónclave.

La presión de cinco de los magistrados del Tribunal de Garantías, los progresistas Cándido Conde-Pumpido, María Luisa Balaguer, Ramón Sáez, Inmaculada Montalbán y Juan Antonio Xiol para dilatar cualquier resolución ante la «imposibilidad» de un «estudio completo del asunto, a la vista del volumen de la documentación aportada, de la complejidad de la cuestión que plantea el recurso y de su relevancia» –bajo amenaza de ausentarse «de la deliberación» y la posterior «votación» y boicotear así el cónclave– han hecho el resto.

Así las cosas, a esta hora el Gobierno ha conseguido despejar el camino, según lo previsto en el orden del día del Congreso, para aprobar en primera instancia la modificación del sistema de elección de los miembros del propio Constitucional eliminando la mayoría de tres quintos actualmente necesaria, y sustituyéndola por una simple, en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para la elección válida de los dos magistrados que le corresponden. Una designación que, esta misma mañana, el presidente interino del máximo órgano de los jueces, el progresista Rafael Mozo, fijaba en convocatoria extraordinaria el día 20 de este mismo mes.

Por lo tanto, a pesar del 'mus' que se ha dado el Constitucional, los conservadores del Consejo sí han conseguido su objetivo inicial: que la designación de los dos perfiles –que sumados a los dos ya aprobados por el Gobierno para incorporarse en bloque a la renovación del tercio del TC caducado, el pasado mes de junio– se haga según la mayoría reforzada todavía vigente y con el preceptivo control de «idoneidad», antes de la entrada en vigor del polémico doble parche de Pedro Sánchez.

Y, esto es así, porque para que las enmiendas 61 y 62 promovidas por PSOE y Unidas Podemos no serán aplicables de facto, y como mínimo, hasta el día 24 de diciembre, dos después de que el Senado vote la aprobación de las mismas –superado el paso previo que el Congreso consumará hoy– y uno después de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del viernes 23.