El PSOE critica ahora al Rey Felipe por no legitimar el asalto al CGPJ: «Está absolutamente al margen»

El diputado del PSOE por Guipúzcoa Odón Elorza ha advertido de que se existe un «clima de degradación de la democracia» en el Estado y ha reconocido que no entiende por qué el Rey «no trata de mediar para que, en defensa de la democracia, se consiga orientar el mejor funcionamiento de las instituciones».

1. En una entrevista en Cadena Ser, Elorza se ha referido a la reforma del Código Penal que deroga el delito de sedición y al recurso del PP al Tribunal Constitucional para que paralice la tramitación.

En este sentido, Elorza ha manifestado que los «antecedentes» indican que hay un «comportamiento extraño y partidista por parte del Consejo General del Poder Judicial, de la mayoría conservadora, y del Tribunal Constitucional».

«Estos sectores de cúpula están siguiendo el juego claramente al PP, intentando contribuir a degradar la imagen del Gobierno, deslegitimando el Ejecutivo de coalición y poniendo obstáculos al pronunciamiento del parlamento», ha lamentado.

De este modo, ha confiado en que el Tribunal Constitucional este lunes tenga «sentido común, responsabilidad y altura de miras democráticas», así como que «baje la intensidad de la polarización y degradación de la democracia y del debilitamiento del estado de derecho».

Respecto a la ley de libertad sexual, más conocida como ley del 'solo sí es sí', que ha acarreado las rebajas de penas en algunos casos, ha advertido que habrá que ver si se puede establecer jurisprudencia para que no haya reducción de penas y, «si no se consigue, se deberá abordar una reforma suficiente de una ley que es imprescindible» en favor de la libertad sexual de las mujeres.

Asimismo, ha criticado que «la derecha se encarga de amplificar» la alarma y «no aporta soluciones», generando «un clima de griterío y bronca en el Parlamento». «Es lo que interesa a PP, Vox y Cs, situarse en la bronca», ha afirmado, para añadir que el actual «clima de degradación de la democracia y de pérdida de calidad» debería ser abordada por el Rey Felipe VI.

«No entiendo que la figura del Rey, que tiene la obligación de arbitrar y moderar el regular funcionamiento de las instituciones, esté absolutamente al margen y no trate de mediar para que, en defensa de la democracia, se consiga orientar el mejor funcionamiento de las instituciones. Está ahí y para eso cobra», ha finalizado.