¿Por qué las pistolas Ramon que enervan a los guardias civiles se llaman así?
La polémica pistola lleva el nombre de un militar y astronauta israelí, país de fabricación del arma
La compra por parte del Ministerio del Interior de 3.000 pistolas marca Glock para renovar los revólveres de los policías nacionales han dejado más en evidencia el desastre que supuso la compra de 9.000 pistolas para la Guardia Civil, ya que desde que llegaron las primeras unidades después del pasado verano no han hecho más que aumentar las críticas hacia esos dispositivos de fabricación israelí por parte de la empresa EMTAN.
La diferencia es evidente, mientras que las 9.000 pistolas de EMTAN costaron 2 millones de euros, poco más de 200 euros por pistola, las 3.000 Glock 43X supusieron un desembolso de 1,2 millones de euros, 400 euros por pistola.
Lo curioso es que estas pistolas a disposición de los guardias civiles que tanto están fallando se llaman 'Ramon', lo que, además de sonar un poco raro, 'pistolas Ramon', ha dado pie a infinidad de aforismos aprovechando esta denominación: «Pistolas Ramon fallan un montón» o «pistolas Ramon se encasquillan un montón» son frases ya recurrentes entre los que conocen estas armas.
Pero lo cierto es que, aunque suene un poco a chiste, efectivamente estas armas compradas precisamente por su bajo coste, se llaman así oficialmente, 'pistolas Ramon'. Tiene la misma grafía, si exceptuamos la tilde, que un nombre tan español como Ramón. Incluso su pronunciación en hebreo también es idéntica. Sin embargo, aunque las pistolas Ramon se han convertido en la última y polémica adquisición del Ministerio del Interior para la Guardia Civil, estas armas nada tienen que ver con España más que su propia adquisición.
¿De dónde viene el nombre Ramon?
Las pistolas Ramon, antes de que resultaran un fiasco, pretendían homenajear a Ilan Ramon, un militar y astronauta israelí que falleció el 1 de febrero de 2003 en la tragedia del transbordador Columbia.
Ilan Ramon nació en Ramat Gan, Israel, en 1954. Como militar tuvo una brillante carrera que le llevó con tan solo 19 años y recién graduado en la Escuela de Vuelo de la Fuerza Aérea Israelí a participar en la Guerra de Yom Kipur, en 1973. También participó en acciones militares a comienzos de los años 80 en Irak y en Líbano. A lo largo de su carrera militar acumuló casi 5.000 horas de vuelo con aviones Douglas A-4, el Mirage III-C y F-16.
Esta experiencia, junto con su licenciatura en ingeniería electrónica y computación de la Universidad de Tel Aviv le llevó a ser seleccionado como especialista de carga por la NASA y le entrenó durante 5 años para la misión del transbordador Columbia STS-107 que le llevaría durante casi 16 días al espacio para realizar distintos experimentos junto con otros 6 compañeros.
En el regreso de la aeronave, el 1 de febrero de 2003, lo que pareció ser la ausencia de unas losetas, desprendidas durante el despegue, hizo que la nave espacial se desintegrara el entrar en la atmósfera y los siete tripulantes de la nave fallecieron en el acto.
Además de serle concedida a título póstumo la Medalla Espacial de Honra del Congreso de Estados Unidos y ser oficialmente reconocido como Héroe Nacional de Israel, la empresa EMTAN decidió ponerle su nombre a la que pretendía ser su arma estrella, la pistola semiautomática Ramon.