Paco Vázquez: «Está amenazada la unidad de España y la democracia»

memoria viva del PSOE y embajador de España ante la Santa Sede durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Paco Vázquez detalla en esta entrevista su apoyo público a la concentración del próximo sábado, que coordina el Foro España Cívica.

–¿Qué motivos le han llevado a declarar su apoyo a la concentración del próximo día 21 de enero en Madrid?

–No solo he realizado una declaración de apoyo público, sino que también me desplazaré hasta Madrid para estar físicamente presente en la concentración. Creo que estamos atravesando un momento muy grave para la convivencia de los españoles.

–¿Por qué cree usted que en España atravesamos por un momento «muy grave»?

–Todos los grandes valores de diálogo, consenso y entendimiento que caracterizaron a la Transición no solo están en peligro sino que, de facto, ya están desapareciendo del escenario político; y la evaporación de estos valores ocasiona un desfallecimiento de los instrumentos propios de la democracia. Lo acabamos de contemplar, por ejemplo, con la separación de poderes al asistir a todo un espectáculo en el Tribunal Constitucional y el Consejo General del Poder Judicial.

Todos los grandes valores de diálogo, consenso y entendimiento que caracterizaron a la Transición están en peligro

–Hay quien sostiene que peligra la unidad de España. ¿Exageran?

–No exageran. También está amenazada la misma preservación de España como una nación; ello es debido a la alianza con los independentistas catalanes y vascos. Una alianza que incluye a partidos vinculados con las páginas más negras de las últimas décadas; me refiero al terrorismo. Estas son razones suficientes para apoyar la concentración del sábado.

Ruptura con los valores de la Transición

–Me gustaría conocer ahora su visión del actual momento político en España.

–Asistimos en el día a día a un cúmulo de dislates impulsados por el Gobierno de España. A un problema le sucede otro; y nos olvidamos de dos cuestiones fundamentales: la primera cuestión grave es el mismo Gobierno de coalición social-comunista y los objetivos que persigue, que es la ruptura con los valores de la Transición. Ahí tenemos la Ley de Memoria Democrática, que finaliza con la idea de la reconciliación nacional, fundamento esencial de la Constitución.

Los partidos políticos que conforman el Gobierno de coalición avanzan hacia la ruptura de la unidad de España

–¿Y la segunda cuestión?

La segunda cuestión grave es que los partidos políticos que conforman el Gobierno de coalición avanzan hacia la ruptura de la unidad de España, la derogación o modificación sustancial de la Constitución, la ocupación de los órganos de control como el CIS, el Tribunal Constitucional, el Instituto Nacional de Estadística o la Radio y la Televisión Pública. Todo ello significa el avance hacia un Estado de nuevas características políticas, es decir, hacia un Estado totalitario.

Un «inamovible» pacto de hierro

–En el caso de que Pedro Sánchez, tras las elecciones generales de 2023, lograse revalidar la mayoría parlamentaria que le permite seguir al frente del Gobierno, ¿qué decisiones cree que cabría esperar de esta hipotética nueva legislatura?

–No hay que elucubrar con ninguna hipótesis para señalar que hoy el Gobierno de España obedece a un pacto, que se ha manifestado como un inamovible pacto de hierro.

Este pacto de hierro nace de la moción de censura. Con este pacto, los partidos rupturistas con el proceso democrático buscan la ruptura de la unidad de España, la derogación de la Constitución, el cambio de la forma de Estado, etc.

En España se ha introducido nuevamente una división radical entre las dos Españas, y llevada hasta extremos inimaginables

–La acumulación cotidiana de dislates que usted mencionaba antes podría generar un efecto entontecedor que provoque que, por acumulación, todo se olvide y al final quede en nada.

–Los españoles no pueden perder la memoria de lo que ha representado la ley de Educación, la Ley de Memoria Democrática, las imposiciones de la minoría en cuestiones de familia, género, etcétera. Y, sobre todo, en España se ha introducido nuevamente una división radical entre las dos Españas, que está siendo llevada hasta unos extremos inimaginables: hombres contra mujeres, fascistas contra progresistas, españolistas contra independentistas, etc. Una nueva legislatura de este pacto de hierro sería la continuación intensificada de todo lo que ya hemos sufrido hasta ahora.