Tecnología
Así nos ve físicamente a los españoles la inteligencia artificial
El resultado tiene sus luces y sus sombras, pero es difícil que ninguno de los rostros que aparecen en esta imagen no nos recuerde a alguien conocido
La inteligencia artificial, aunque todavía en pañales, está suponiendo toda una revolución en multitud de sectores y no son pocos los profesionales que ven peligrar sus trabajos de aquí a pocos años. A las increíbles dotes literarias de ChatGPT que –¡Dios no lo quiera!– puede mandar a los profesionales del periodismo al vertedero de la Historia, se le unen en los últimos tiempos algunas que hacen temblar a los más cualificados ilustradores.
Es el caso de Midjourney, una aplicación que, al igual que otras muchas, genera imágenes a partir de órdenes básicas de texto. Esto es lo que hizo recientemente el usuario de TikTok @everythingartificial, quien mandó a la aplicación que representase en modo selfie a distintos pueblos de diferentes etapas históricas, entre ellas los españoles actuales.
El resultado tiene sus luces y sus sombras. Y es que estas aplicaciones presentan aun bastantes sesgos. En la imagen superior podemos apreciar cómo, contra lo que dicen los datos del INE, en España debemos de ser casi todos hombres, a tenor de la poca presencia femenina de la imagen. Unas mujeres que, además, destacan por tener todas el pelo rizado u ondulado, algo que tampoco se corresponde con la realidad.
Llaman la atención también otras características fisionómicas de los españoles esta imagen que, en base a los registros de Internet, la IA en cuestión tiene de los habitantes de nuestro país. Entre otras, que todos los españoles debemos de tener barba, edades comprehendidas entre los 30 y los 55 años, alergia a las camisas y un uniforme cabello castaño.
En España, en realidad, hay en torno a un 7 % de rubios y en algunas regiones el porcentaje se eleva hasta el 20 %, según algunos estudios. Mención aparte sería el asunto de la total ausencia de alopecia en la representación de los ciudadanos de un país que está siempre en el top-3 de mayor número de calvos del mundo.
Sin embargo, más allá de todas estas sombras, el trabajo realizado por esta inteligencia artificial refleja de manera muy acertada los rasgos faciales característicos de los españoles o, al menos, de muchos de ellos. Es difícil que ninguno de los rostros que aparecen en esta imagen no nos recuerde a algún familiar, amigo, vecino o, incluso, a nosotros mismos.
De la Conquista a la «España de las tres culturas»
El resultado de las directrices de @everythingartificial no ha sido el único que incumbe a los españoles en cuanto a IA se refiere. Por ejemplo, otra cuenta de TikTok, @Vsulexperience, nos enseñaba cómo debían aparentar los españoles de la denominada «España de las tres culturas», o sea la conformada por cristianos, judíos y musulmanes de la Edad Media.
En este caso, podemos observar cómo la aplicación desbarra un poco, no solo por la omnipresencia de narices aguileñas, sino por la inclusión de elementos extraños –una suerte de ooparts digitales–, como las modernas gafas de sol que lucen algunos de estos españoles medievales.
El usuario de Twitter @Josma_Design, español que está realizando un cómic con inteligencia artificial, también se lanzaba a esta dinámica de crear españoles históricos haciéndose autofotos y, en este caso, nos ilustra con un elenco de conquistadores de América en el que caben, lógicamente, también otras nacionalidades de la época, como puedan ser genoveses o portugueses.
Un ejemplo más de las posibilidades de estas tecnologías, que ya nos enseñaron hace algunas semanas cómo es la esencia de las comunidades autónomas e incluso cómo serían unos hipotéticos supervillanos típicos de cada región española.
También pudimos ver, de la mano de @loubfreitas y de la citada IA Midjourney, cómo sería el supervillano de España, además de los de otros muchos países. En nuestro caso, y como no podía ser de otra –tópica– manera, estaba encarnado por un toro bravo humanoide, una especie de minotauro que, a diferencia de lo que ocurre hoy en día con nuestro país, muy pocos se atreverían a torear.