La corrupción del PSOE, el deterioro institucional y la amenaza a la soberanía centran la moción de Vox

El foco político y mediático estará puesto hoy en el Congreso de los Diputados, que, por sexta vez en democracia, asiste al debate de una moción de censura. La de este martes, la segunda que se presenta contra el Gobierno de Pedro Sánchez, y también la segunda que presentan los 52 diputados de Vox, es, sin embargo, una moción inédita. Ninguna otra había estado encabezada por un candidato independiente. Tampoco ninguna otra había recibido tantas críticas desde el momento en que se planteó.

Santiago Abascal será el primero en tomar la palabra, como encargado de presentar a Ramón Tamames, en una sesión que comienza a las 09:00 horas. Desde la tribuna, el líder del partido expondrá, esta vez sin límite de tiempo, los motivos que han llevado a Vox a dar el paso y volver a utilizar esta herramienta prevista en la Constitución con el objetivo, según han explicado, de convocar elecciones y retratar al Ejecutivo central ante los españoles y ante Europa.

Como apuntó el portavoz del grupo parlamentario, Iván Espinosa de los Monteros, Abascal repasará también en su intervención los escándalos más llamativos del Gobierno durante esta legislatura, «desde las maletas de Delcy hasta el caso Mediador», al ver en esta moción la ocasión para exigir las explicaciones oportunas al respecto.

Y es que precisamente la cita parlamentaria llega apenas unas semanas después de que saltara a escena una nueva trama de corrupción que ha puesto en jaque al PSOE, que además tampoco atraviesa el mejor momento con su socio de coalición, Unidas Podemos, habida cuenta de las tensiones por la reforma de la ley del 'solo sí es sí' y del distanciamiento que se viene acentuando en pleno ambiente electoral.

Pero además de la corrupción, Abascal abordará en su discurso las razones que han llevado a Vox a querer censurar al que considera «el peor Gobierno» en muchas décadas de la historia de España, empezando por el hecho de que Pedro Sánchez pactara con Podemos, ERC y Bildu después de haber prometido no hacerlo en campaña electoral.

Muchos de estos motivos ya le llevaron a registrar una primera moción en 2020, entonces con él como candidato, pero se han sumado a la lista, entre otros aspectos, las medidas legislativas más recientes del Ejecutivo de coalición, desde la derogación del delito de sedición y la rebaja del de malversación hasta las leyes impulsadas desde el Ministerio de Igualdad, como la citada ley del 'sólo sí es sí' o la ley trans.

«Es un Gobierno que nace de la mentira, que se instala en la traición por el pacto con todos esos enemigos del orden constitucional, que nos ha conducido a la ruina, que se ha lanzado al asalto de las instituciones democráticas», denunció ayer Abascal en una entrevista en COPE. El líder de Vox previsiblemente pondrá el foco en el «asalto» por parte del Gobierno a los contrapoderes del Estado e instituciones como el Tribunal Constitucional, el Consejo General del Poder Judicial o el CIS, así como en las políticas en materia económica y fiscal, y también en materia de inmigración o las decisiones en política exterior tomadas por parte del Ejecutivo que suponen poner en riesgo la soberanía nacional.

La atención estará puesta en el discurso que pronunciará el candidato a la presidencia del Gobierno, Ramón Tamames. Si bien hace unos días se filtraba un borrador del mismo, tanto el propio Tamames como desde el partido han asegurado que se trata de una versión «anticuada» y que el que se leerá este martes incluirá novedades y explicaciones más detalladas. En cualquier caso, el discurso del catedrático no será un programa de Gobierno, sino un diagnóstico de la situación que atraviesa España, que lleva a concluir la necesidad de un «cambio de rumbo» y de la convocatoria de elecciones anticipadas.

«Sánchez o Tamames»

En el mes de noviembre, y tras el anuncio de Sánchez sobre la reforma del delito de sedición, Santiago Abascal reclamó a Alberto Núñez Feijóo que tomara la iniciativa, llegando a afirmar que su apoyo estaba garantizado si el PP presentaba a un candidato de consenso que se comprometiera a convocar elecciones anticipadas. El líder 'popular', sin embargo, rechazó la propuesta, y desde que Vox anunciara que la presentaría de nuevo, se ha mantenido en la abstención y ha criticado a los de Abascal argumentando que, a su juicio, una moción en estos momentos solo servirá para reforzar al Gobierno.

La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, reafirmaba este lunes su posición aseverando ante los medios que esta moción «se utiliza como una campaña de marketing y por puro electoralismo». No obstante, Vox, que plantea al PP la disyuntiva entre Pedro Sánchez o Ramón Tamames, ha instado a los populares a escuchar con atención la intervención del economista antes de decidir su voto.

A pesar de las críticas y de que no cuentan con los apoyos necesarios –176 síes– para que prospere su iniciativa, Abascal –y así insistió varias veces en rueda de prensa el pasado jueves desde el Congreso– asegura que están «muy tranquilos», al considerar que han cumplido con su obligación de emplear todas las herramientas a su alcance para hacer oposición al Gobierno de Pedro Sánchez.