Daniel Sirera: «La gestión de Colau ha sido nefasta y Barcelona está hecha 'unos zorros' por su culpa»

Daniel Sirera, (Badalona, 1967) es el candidato del Partido Popular al Ayuntamiento de Barcelona. Desde Génova 13 se pusieron en contacto con él para ofrecerle el proyecto, y dijo que sí. Entre sus grandes aficiones se encuentra montar en moto e ir de bodegas. Además, es un viejo conocido del PP catalán ya que lo presidió entre 2007 y 2008, y fue diputado en el Parlament desde 1995 hasta 2010.

–El PP no ha logrado ganar nunca la alcaldía de Barcelona. ¿Qué plantea usted para conseguir este objetivo?

–Lo que nosotros proponemos es devolverle el sentido común al Ayuntamiento de Barcelona. Necesitamos que haya concejales a los que les interese la gente. Tengo la sensación de que en los últimos años la política ha perdido mucho en Barcelona; no solamente por parte del Gobierno municipal, sino también del resto de fuerzas políticas. Los ciudadanos en Barcelona nos hemos acostumbrado a estar al servicio del Ayuntamiento, y de lo que tenemos que darnos cuenta es que el Ayuntamiento debe estar al servicio de los ciudadanos. Ese es el principal problema que tienen hoy los barceloneses.

A mí lo que me gusta es ser un alcalde de pueblo, de los que desde que se levantan por la mañana hasta que se van a dormir están en la calle hablando con los ciudadanos, con los vecinos. Lo que pasa es que mi pueblo tiene 1.600.000 habitantes.

Poner al lobo a cuidar de las ovejas es mala cosa. Y Sánchez está poniendo a Esquerra Republicana y a Bildu a encargarse de los problemas que nos afectan a los españoles

–Ocho años de Ada Colau en la Alcaldía de Barcelona, ¿cómo valora su gestión?

–Ha sido nefasta. La ciudad de Barcelona está peor que nunca. Yo digo que está hecha unos zorros por su culpa, aunque no es una responsabilidad exclusiva de Ada Colau. El anterior alcalde, Xavier Trias, ya empezó a hacer cosas que ahora estamos comprobando que no eran acertadas. Por ejemplo, no construyó ni una sola vivienda, impulsó las Superilles, que ahora están siendo un problema para la circulación en Barcelona, y permitió que los okupas se instalasen en Can Vies.

En estos últimos ocho años, Ada Colau y el Partido Socialista de Collboni -que a veces la gente se olvida que también gobierna Barcelona- han convertido la ciudad en un lugar en el que la gente no quiere venir ni a invertir, ni a vivir; y muchos ciudadanos se están planteando irse fuera. Hay que devolverle a Barcelona ese pasado que tuvo, glorioso, el de las Olimpiadas del año 92 que todos recordamos con emoción e ilusión. Así pues, lo que debemos hacer es volver a tener un Ayuntamiento que piense en el futuro de Barcelona y no viva de las rentas del pasado.

–La actual alcaldesa está imputada por varios delitos (de prevaricación y coacción). ¿De qué manera le va a afectar esto a su posible reelección?

–Yo creo que a la gente de Podemos y de Barcelona en Comú, que son los mismos, estas cosas no les afectan porque ostentan esa especie de bula. La izquierda tiene una superioridad moral que le permite exigir la dimisión en el caso de Badalona, de Xavier García Albiol, y en cambio, cuando les afecta a ellos -y han amenazado y han extorsionado a gente- no pasa nada. Esa es la esa doble moral de la izquierda que hay que combatir.

–Sobre la imputación de García Albiol, él ha dicho que no es casualidad que se haya dado a conocer dos meses antes de las elecciones. ¿Comparte esta opinión?

–Después de 12 años de los hechos -un mes de agosto en el que Albiol tenía delegadas las competencias en otro concejal- llegó Vodafone y Movistar y pusieron una especie de remolque con unas antenas para que en dos barrios de Badalona la gente pudiera utilizar la telefonía móvil; ahora le abren un juicio oral y le acusan, poco menos, de que es un delincuente. Eso responde a una voluntad cierta por parte de la izquierda y de otras fuerzas políticas de evitar que Albiol sea el alcalde de Badalona, cuando además siempre gana las elecciones y luego en los despachos el resto de los grupos se unen para para desbancarle. Lo hacen porque en Cataluña, como en el resto de España, quien prueba un gobierno del PP repite, y la izquierda y los nacionalistas lo saben.

Tenemos una alcaldesa que ha convertido a Barcelona en un paraíso de los antisistema, en un parque temático de la inseguridad

–Barcelona es una de las ciudades con mayor índice de criminalidad de España. ¿Cómo se ha llegado a esta situación y como la abordaría usted?

–Hay un déficit brutal de agentes de la policía. Faltan mil agentes de la Guardia Urbana, que son una responsabilidad de Colau y de Collboni. Además, el Partido Socialista es quien dirige la seguridad en Barcelona. También hay un problema grave porque nos faltan 3.000 agentes de los Mossos d'Esquadra.

Igualmente, tenemos una alcaldesa que ha convertido a Barcelona en un paraíso de los antisistema, en un parque temático de la inseguridad en el que se roban relojes y se okupan viviendas. Al final, los turistas no quieren venir porque hay miedo y los comerciantes están preocupadísimos debido a que en algunos barrios la Guardia Urbana no se atreve a entrar.

Cuando hay un conflicto entre un guardia urbano, un policía local, o un presunto delincuente que ha utilizado una navaja; el Ayuntamiento siempre se pone del lado del presunto delincuente. Muchas veces se suspende de sueldo al agente de la Guardia Urbana por este tipo de casos.

–¿De qué modo se puede solventar el problema de la okupación?

–Ahora hay tres sitios okupados, uno de ellos es una antigua comisaría de la Policía Nacional, y Colau no hace nada. El otro día tenían que desalojar un inmueble okupado, y los okupas lo que hicieron fue robar como 30 o 40 vallas del Ayuntamiento de Barcelona y delante de todo el mundo empezaron a soldarlas para hacer una barricada. El Ayuntamiento no mandó a la policía local ni la Generalitat a los Mossos D'Esquadra, y en consecuencia estaban utilizando mobiliario público para defenderse de la propia policía. Eso no puede ser, porque el mensaje que se lanza es que en Barcelona está todo permitido

No puede ser que el que incumple la ley tenga más derechos que el que la cumple. La ciudad necesita orden y un alcalde que le diga a los delincuentes que no va a tolerar estos compartimientos desde el Ayuntamiento. Yo he visto en el Instagram de la teniente de alcalde de Ada Colou una foto con una camiseta que dice que hay que okupar, que la okupación es buena. No se pueden permitir ese tipo de cosas en una ciudad como Barcelona.

–Otro de los grandes escollos de Barcelona es la movilidad, en todos sus ámbitos. De lo que ha hecho Colau hasta ahora, ¿qué dejaría y qué modificaría?

–Lo cambiaría casi todo porque su interés es eliminar el vehículo privado de la ciudad. Hay una cruzada contra el coche y contra la moto. Por ende, ella pretende imponer su modelo de movilidad al resto de ciudadanos. Además, defiende que sus medidas sirven para mejorar los niveles de contaminación. Sin embargo, si lo comparamos con Madrid, por ejemplo, en la capital se cumple la normativa europea de contaminación atmosférica y en Barcelona no.

A mí Colau me pide que no vaya con mi moto antigua por Barcelona, pero en cambio hay autobuses municipales que funcionan y tienen más de 14 años. Es muy contradictorio. Deja una calle sin que circulen vehículos y lo que hace es guerrificar la calle de al lado, que se lleva el doble de circulación, el doble de atasco y, en consecuencia, el doble de contaminación. Ella tiene una cruzada contra el vehículo privado y nosotros lo que queremos para Barcelona es que el que quiera ir en vehículo privado pueda ir, pero el que quiera utilizar el transporte público también pueda.

Trias está engañando a los ciudadanos de Barcelona. Les está diciendo que no es independentista

–Junts presenta a Trias en Barcelona como una punta de lanza para intentar resurgir al partido. ¿Cree que lo conseguirá?

–Trias está engañando a los ciudadanos de Barcelona. Les está diciendo que no es independentista, que no representa a su partido. Pero él es miembro de Junts, del partido de Puigdemont y de Laura Borrás. Va a hacer una candidatura en la que todos los que le acompañan son personas que durante el 1 de octubre estuvieron remando a favor de la independencia.

Recuerdo vídeos de Trías pidiéndole a Ada Colau que pusiera a Barcelona al servicio de la independencia de Cataluña; que pusiera urnas y que facilitara locales municipales para que se pudiera votar. Trias es eso, aunque ahora lo oculte porque quiere robar votos de todas partes, incluso del Partido Popular. No obstante, la gente no es idiota. Después de Colau, ha sido el peor alcalde que ha tenido la ciudad de Barcelona. Yo le recuerdo siempre a la gente que fue tan mal alcalde que, por su gestión, nefasta, provocó que llegara Ada Colau.

–En un ejercicio de política ficción, ante un posible tripartito en el Ayuntamiento de PSC, Esquerra y los Comunes, ¿el PP apoyaría Trias?

–Me cuesta mucho tener que elegir entre susto y muerte. Collboni tampoco es una solución para Barcelona porque forma parte del problema. Y Trias lo que quiere hacer es poner a Barcelona al servicio de Carles Puigdemont. Barcelona tiene que estar al servicio de los barceloneses. Y si tengo que elegir entre susto y muerte elegiré a Dani Sirera, que creo que es lo que más le interesa a la ciudad de Barcelona.

–En clave nacional, ¿qué le parecen los pactos del PSOE con Esquerra y con los independentistas?

–Me parecen un error y un horror. Sánchez está gobernando con el apoyo de Esquerra Republicana y de Bildu, es decir, con fuerzas políticas que lo que pretenden es precisamente destruir a España. Pero tanto a él como a los socialistas los veo muy cómodos.

Esquerra Republicana apoya a Pedro Sánchez en el Gobierno de España, y el presidente -a través del Partido Socialista Catalán- le aprueba los presupuestos a Esquerra Republicana en la Generalitat. Ahí hay unos intereses políticos partidistas que no se corresponden lo que los ciudadanos necesitamos. Poner al lobo a cuidar de las ovejas es mala cosa. Y Sánchez está poniendo a Esquerra Republicana y a Bildu a encargarse de los problemas que nos afectan a los españoles, y el país no se lo va a perdonar.

–¿Qué papel van a tener Vox y Valents en el Ayuntamiento?

–No hay ninguna encuesta que se haya publicado que diga que Vox vaya a tener representación municipal en Barcelona, ni tampoco Ciudadanos ni Valents. Por eso yo lo que hago es dirigirme a sus votantes. Teniendo en cuenta que sus partidos no van a tener representación, si apoyasen al Partido Popular, el PP se podría plantear como tercera fuerza en Barcelona. Aspiro a representar a esa gente. Como dirigente político y como persona siempre he defendido lo mismo; siempre he creído en España, en el bilingüismo, en la libertad. Les pido hacer del Partido Popular la gran causa común del centro derecha no independentista en la ciudad de Barcelona.

Asimismo, ahí está Esquerra Republicana fijando el tiro en el PP y pidiendo que nos excluyan de cualquier gobierno municipal en la ciudad. Eso significa que es el Partido Popular es el que hace daño a los independentistas. Por tanto, es importante un PP fuerte, para que los independentistas sepan que hay un partido en Barcelona dispuesto a recordarles cada día que Barcelona es España. Eso a ellos les duele y por eso nos combaten.