Cinco años después, rebajan la condena a un agresor independentista por «dilación indebida»

Justo cinco años después de que Francisco agrediera brutalmente a una mujer de 66 años por el simple hecho de estar quitando lazos amarillos de la vía pública, la Audiencia Provincial de Barcelona ha rebajado la condena al agresor después de aceptar el atenuante de «dilación indebida», es decir, que se había tardado más de 9 meses en notificar la sentencia.

Los hechos ocurrieron el 15 de abril de 2018, en plena guerra por los lazos amarillos y cuando los CDR trataban por todos lo medios de hacerse con las calles de Barcelona. Así, de esta forma, cuando Carmen, de 66 años, acudió junto con otros dos amigos al barrio de la Trinidad de Barcelona para retirar los lazos amarillos que los independentistas habían colocado en múltiples lugares públicos.

En un momento dado, apareció Francisco y tras lanzar todo tipo de improperios, agredió hasta en tres ocasiones a esta persona, lo que provocó que cayera al suelo otras tantas veces. Los compañeros que quitaban lazos junto a Carmen, después de intentar defenderla, optaron por grabar los hechos, lo que permitió que quedara como prueba y confirmara que la defensa del agresor, que alegaba que era él quien había resultado amenazado y agredido, no era cierta.

Rebaja de la multa

El caso es que Francisco fue condenado a una multa de 1.710 euros y a indemnizar a la víctima con 3.400 euros por las lesiones causadas y 1.000 euros más por el daño moral. El agresor recurrió la sentencia del juzgado ordinario que le encausó y ahora la Audiencia Provincial de Barcelona ha aceptado parcialmente el recurso y le ha rebajado la multa a 630 euros al considerar el atenuante de «dilaciones indebidas».

Eso sí, el resto de la condena, incluida la orden de alejamiento de 200 metros durante dos años, han quedado tal cual fueron sentenciadas por el juzgado ordinario.