El Ayuntamiento que calificó a 'Txapote' de víctima tiene un mes para retirarlo

Las páginas web del proyecto Oroimena que incluía a terroristas entre las víctimas llevaban casi un año blanqueando en la red a peligrosos asesinos. Sin embargo, no ha sido hasta que salió publicado en varios medios de comunicación, entre ellos El Debate, a raíz de la denuncia de un concejal socialista, cuando la Delegación del Gobierno en el País Vasco ha reaccionado y ha remitido un escrito a seis ayuntamientos para que retire dichas páginas web.

Son los ayuntamientos de Orio, Oyarzun, Hernani, Villabona, Azpeitia y el de Galdácano, que presentaba al más sanguinario terrorista, 'Txapote', como «víctima de los derechos humanos». Todos ellos tienen un mes de plazo para retirar estas páginas web. La Delegación del Gobierno ha advertido que «si no se atiende a este requerimiento, la Abogacía del Estado emprenderá las acciones pertinentes».

En concreto, según la Delegación del Gobierno en el País Vasco, se está produciendo «una evidente vulneración de la ley de Reconocimiento y Protección Integral de las Víctimas del Terrorismo. En esas webs se homologa a los miembros de ETA con los asesinados por la banda terrorista al considerar que »sufrieron vulneraciones de derechos« y se define como »cautiverio" su estancia en prisión fruto de condenas impuestas por los tribunales de un Estado democrático y de Derecho, sostiene la Delegación.

Dos ya las han desactivado

Además, la representación del Gobierno central en el País Vasco ha podido comprobar que otros dos consistorios, el de Erandio y el de Tolosa, han dado ya instrucciones para desactivar dichas páginas.

El proyecto Oroimena (Memoria, en euskera), se agarra a la ley de Memoria Democrática para recordar a vecinos de las localidades que han sufrido vulneración de los derechos humanos. Hay un apartado que es la 'Memoria histórica' y se refiere a lo que consideran víctimas de la Guerra Civil y del Franquismo, y otro apartado dedicado a la 'Memoria reciente', donde se unen lo mismo personas asesinadas por ETA, que son calificadas de «fallecidos», y sus asesinos, que son considerados como «víctimas».