Paco Núñez: «No hay ni una sola ley promovida por Sánchez que no haya sido avalada por Page»

Francisco Núñez (Almansa, Albacete, 1982) pretende desbancar a Emiliano García-Page y convertirse en el octavo presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha a partir del próximo 28 de mayo. Será su segunda oportunidad, después del fracaso que supusieron los comicios de 2019, en los que el Partido Popular perdió seis escaños, cayendo hasta los 10; muy lejos de los 19 que obtuvo el barón socialista. Ahora los sondeos arrojan un resultado mucho más ajustado y el presidente del PP de Castilla-La Mancha se muestra convencido de que su partido puede gobernar la región, al menos, durante los próximos cuatro años.

–Distintas encuestas publicadas en medios de comunicación apuntan a que Emiliano García-Page perdería la mayoría absoluta el próximo 28 de marzo. ¿Qué arrojan los sondeos internos del PP sobre este asunto?

–Lo que dicen nuestras encuestas es muy parecido a los sondeos que se están publicando en distintos medios de comunicación y que pertenecen a distintas casas demoscópicas. Y es que hay una tendencia en la que semana tras semana el PSOE pierde votos y el PP los gana. Ya estamos muy cerca de sacar un voto más que el PSOE, que es nuestro objetivo. Hay alguna encuesta que nos dice que ganaríamos en votos y en escaños, pero las nuestras, siendo honesto, lo que nos dicen es que estamos muy cerca de sacar un voto más que Emiliano García-Page y que el PSOE está muy lejos de la mayoría absoluta. Por lo tanto, se abriría un escenario de un posible Gobierno del PP en Castilla-La Mancha.

–Esas encuestas también señalan que el PP necesitaría a Vox para poder gobernar. ¿Ve muchos puntos de desacuerdo para que no se pudiera alcanzar un pacto de algún tipo con ellos?

–A lo que está Paco Núñez y a lo que está el PP es a seguir planteando cómo vamos a gobernar en Castilla-La Mancha a partir del día 28 de mayo, cuando ganemos las elecciones. Cuando las encuestas dicen que estamos tan cerca de sacar un voto más que el PSOE, nuestro trabajo sólo puede ser el lograrlo y, por lo tanto, en lo que ponemos todo nuestro empeño es en aglutinar una gran mayoría de voto en torno al PP que nos pueda permitir ser la opción elegida de manera mayoritaria por los castellano-manchegos el próximo día 28 de mayo. Para que la valentía, la estrategia, la ilusión, la determinación y el rigor vengan a un Gobierno en Castilla-La Mancha de la mano del PP y abandonemos esa inercia, esa incapacidad, a la que nos ha llevado el PSOE, que gestiona caminando hacia la nada.

–Una de sus propuestas es el Eje de Crecimiento del Sur de Europa entre Castilla-La Mancha, la Comunidad de Madrid y Andalucía, que se materializaría si el PP gobernara en la región. ¿En qué se traduciría para los ciudadanos este acuerdo?

–Parece razonable y sensato pensar que Castilla-La Mancha, que linda en nuestro sur por Andalucía y en nuestro norte con Madrid, deba de incorporarse a ese crecimiento que ya sustentan hoy los gobiernos de Isabel Díaz Ayuso y Juanma Moreno. Yo lo que he propuesto es un eje de crecimiento para el desarrollo del sur de Europa, que arranque en Madrid, que culmine en Andalucía y que tenga como epicentro a Castilla-La Mancha.

Que sea un lugar que nos abra hacia el oeste, hacia la salida con Portugal, que además tiene también un movimiento de crecimiento importante. Un lugar que nos abra puertas hacia el Este y la salida hacia el Levante. Y un lugar que nos conecte también hacia Europa. Y ese eje de crecimiento para el desarrollo del futuro tiene que venir a generar un gran territorio, de región de regiones, de alianza, de políticas comunes, que haga que un inversor, que una multinacional, que un fondo que quiera llevar a cabo una actividad económica en el entorno del sur de Europa vea a nuestros territorios como una oportunidad y que en lugar de competir entre nosotros, lo que hagamos sea tejer alianzas para ser más fuertes y para ofrecer de manera conjunta nuestros espacios para el crecimiento. Madrid tiene un gran foco, pero necesita terreno y Castilla-La Mancha tiene mucho terreno y poco foco. Parece sensato tratar de conjugar ambas cuestiones.

El cambio que va a llegar a Castilla-La Mancha va a preceder al cambio que va a llegar a España, que va a ser bueno para todos

–¿Qué opinión cree que tiene Page sobre algunas de las leyes ideológicas del Ejecutivo de coalición, como las de eutanasia, la ley trans o la del 'solo sí e sí'?

–En política, dos que votan igual son lo mismo. No hay ni una sola votación de una ley promovida por el PSOE de Sánchez que no haya sido votada y avalada por el PSOE de Emiliano García-Page. De poco valen las palabras si al final se vota con Sánchez. Page lo que intenta es escapar. Hace un ejercicio de escapismo. Deja un titular, si es posible, en un medio de comunicación nacional, luego recoge un poquito de cuerda porque se da cuenta de que se puede enfadar Sánchez y entonces le hace alguna concesión y algún gesto y finalmente vota lo que dice Sánchez. Si un político no es útil y además falta permanentemente a su palabra, pues deja de ser creíble. Hoy Page ha perdido toda credibilidad.

–El presidente castellano-manchego daba plantón recientemente a Sánchez en dos actos del PSOE, en Albacete y Toledo. ¿Considera que esta postura del líder autonómico de distanciarse del presidente le perjudica a usted?

–El problema no es que me perjudique a mí. El problema es la política del PSOE, que perjudica al conjunto de los españoles. Page está pensando en votos. Que nadie tenga ninguna duda. Si Page necesita a Podemos para formar Gobierno, pactará, como ya lo hizo. Y si Page tiene que hacer campaña para Pedro Sánchez, la hará, como ya lo ha hecho. Por lo tanto, mientras que Page está en tacticismos electorales, Paco Núñez y el PP están en ver cómo convertimos a Castilla-La Mancha en una tierra de vanguardia. Tenemos las ideas claras para gobernar y el cambio que va a llegar a Castilla-La Mancha va a preceder al cambio que va a llegar a España, que va a ser bueno para todos.

Yo quiero ser presidente y hay que hacerlo con los mejores, incluidos aquellos que han militado en un partido como Cs y que pueden ser grandes gestores

–Alberto Núñez Feijóo lleva algo más de un año presidiendo el PP. ¿Qué ha supuesto su llegada para el partido en Castilla-La Mancha?

–Es un presidente que permite trabajar con la libertad propia de entender la singularidad de cada territorio y de que dentro de un marco nacional y de una política que es común para todos, que es la del PP, podamos tener la particularidad necesaria en cada zona para poder aplicar las políticas que en cada momento nos ayudan a crecer como territorio. Yo creo que el presidente Feijóo ha dado estabilidad, seguridad y confianza y ha transformado al PP en un un partido ganador. El PP va a ganar las elecciones municipales y autonómicas y Alberto Núñez Feijóo va a sorprender al Gobierno cuando las convoque Pedro Sánchez. Esa confianza que ha depositado en el partido y que nos ha trasladado a todos supone un cambio muy importante para el partido y para nuestras opciones de gobierno.

–¿Cómo valora la fuga de cargos de Ciudadanos hacia el PP? ¿Tratará usted de dar cabida en el partido a alguno de ellos?

–Creo que captar talento siempre está bien. Yo quiero ser presidente de Castilla-La Mancha y hay que hacerlo con los mejores, incluidos aquellos que han militado en un partido como Ciudadanos y que pueden ser grandes gestores. Hay varios candidatos por el PP que lo han sido por Cs en el pasado. Porque nosotros no somos menos que nadie y lo que merecemos es un Gobierno con decisión, con estrategia, con las ideas muy claras para conquistar el futuro que nos pertenece.