El Gobierno recurre a Franco mientras el PSOE intenta recoger los restos del naufragio

Los socialistas tratan de digerir, a duras penas, la derrota apabullante que sufrió Pedro Sánchez ante Alberto Núñez Feijóo en el único cara a cara de la campaña. En Ferraz y la Moncloa se han tenido que desayunar este martes con el veredicto casi unánime de la prensa, incluido El País; y esperan con nerviosismo los trackings de este miércoles, que reflejarán la magnitud del desastre.

En el equipo de Pedro Sánchez llevaban días inflando las expectativas sobre el duelo televisivo, porque según afirmaban iba a ser la confirmación de la remontada de Sánchez y el espoleo definitivo para el electorado de izquierdas. Pero, en lugar de eso, el presidente del Gobierno dio su peor versión.

La maquinaria socialista se ha puesto a funcionar para intentar recoger los restos del naufragio, en medio de un ambiente de pesimismo ante la oportunidad perdida. No tendrán otra, porque Feijóo solo aceptó un único debate en esta campaña. Aunque nada les gustaría más que disponer al menos de otro, para tratar de dar la vuelta al marcador.

Ministros y dirigentes del PSOE repiten a esta hora que el candidato del PP se dedicó a mentir sin lanzar una sola propuesta. Y que Sánchez no podía rebatirlas todas. «Era imposible, (Sánchez) no podía dar réplica a cada mentira», lamentó el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. El propio presidente denunció desde Lituania, a su llegada a la cumbre de la OTAN, que su oponente levantó una «montaña de mentiras».

Tal es el nivel de impotencia del Gobierno que, solo unas horas después del debate, han recurrido al único de sus clásicos que Sánchez no utilizó en el debate: Francisco Franco. Porque sí usó todos los demás: el 11-M, la crisis que gestionó Mariano Rajoy, la foto de las Azores, Marcial Dorado, la etapa de Feijóo como presidente de la Xunta de Galicia…

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo anunció la retirada de las medallas al Mérito del Trabajo al propio Franco y a varios miembros de su régimen: José Luis Arrese y Magra, José León de Carranza Gómez-Pablos, José María Fernández-Ladreda y Menéndez Valdés, Francisco Franco Bahamonde, José Antonio Girón de Velasco, Enrique Plá y Deniel, Jesús Romeo Gorría, José Solís Ruiz y Juan Yagüe Blanco. «El único trabajo de estas personas es haber trabajado por violentar y violar los derechos humanos y pisotear la democracia», sostuvo Díaz. La vicepresidenta segunda anunció la retirada de estas medallas en octubre de 2022, tras la entrada en vigor de la Ley de Memoria Democrática, pero el Ejecutivo eligió justo este martes para hacerlo, tras el debate televisivo.

Por el contrario, desde la mesa del Consejo de Ministros ni ella, ni la portavoz del Gobierno, ni tampoco la ministra de Hacienda quisieron responder a las preguntas que les hicieron los periodistas sobre el debate. La portavoz, Isabel Rodríguez, argumentó que la Junta Electoral Central no les deja. «Nos encantaría responder a sus preguntas, pero es la consideración que se ha hecho por parte de la Junta Electoral», señaló Rodríguez.

Sin embargo, ésta se encontró con que un periodista le pidió que le especificara qué resolución de la Junta Electoral le impide responder a preguntas sobre el debate. Ella contestó que el artículo 50.2 de la Ley Orgánica del Régimen Electoral Central. Pero lo que dice ese artículo es: «Desde la convocatoria de las elecciones y hasta la celebración de las mismas queda prohibido cualquier acto organizado o financiado, directa o indirectamente, por los poderes públicos que contenga alusiones a las realizaciones o a los logros obtenidos, o que utilice imágenes o expresiones coincidentes o similares a las utilizadas en sus propias campañas por alguna de las entidades políticas concurrentes a las elecciones».