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Un agente de la Policía Nacional con un táser

La cámara corporal de un policía capta cómo reduce a un hombre armado gracias a una pistola táser

La Policía Nacional de Valencia se ha visto obligada a intervenir ante un hombre armado con un cuchillo que se negaba a obedecer las órdenes de los agentes

La tecnología y el equipamiento adecuado pueden lograr que los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad actúen ante una situación de peligro con más seguridad, reduciendo los riesgos para su integridad física. Un vídeo que ha visto la luz hoy sábado, y que fue filmado el pasado 5 de agosto, corrobora de nuevo que un entrenamiento adecuado y disponer de medios suficientes genera que las actuaciones policiales sean más limpias y seguras.

Las cámaras corporales, que incorporan algunos agentes y que graban sus actuaciones, permiten ver cómo se realiza una intervención en la que se utiliza una pistola eléctrica para reducir a un individuo. Los agentes de muchos cuerpos de seguridad reclaman desde hace años poder disponer de este arma al salir a las calles.

En esta ocasión, el agente que empuña el táser, solicita a un viandante que se detenga. Ante la negativa de éste a detenerse, y al observar que el ciudadano empuña un arma blanca, el agente de la Policía Nacional desenfunda la defensa eléctrica.

Después de repetirle al individuo hasta en nueve ocasiones que suelte el cuchillo, tras advertirle de que le disparará con el táser, y ante el caso omiso del portador del arma, el agente actúa.

El hombre recibe la descarga y cae al suelo. Es entonces cuando tres efectivos de la Policía Nacional se acercan al sospechoso, le retiran el arma blanca y proceden a arrestarle. En esta intervención queda patente que el uso de la defensa eléctrica les evita a los agentes tener que participar de un enfrentamiento cuerpo a cuerpo con el sospecho, con los consiguientes riesgos tanto para los policías como para el portador del cuchillo.