Constitución de Cortes
Sánchez salva el escollo de la Mesa tras ofrecer al separatismo «desjudicializar el conflicto» y usar el catalán en el Congreso
Vox ha decidido votar a su propio candidato «después de que el PP haya confirmado» que no les «ayudará a conseguir un puesto en la Mesa»
Francina Armengol ya es presidenta de la Mesa del Congreso con 178 votos a favor. La votación volcada en la Cámara Baja ha reflejado el acuerdo alcanzado en el último momento entre Pedro Sánchez y los partidos independentistas catalanes. Una negociación in extremis que allana el camino al candidato socialista de cara a la sesión de investidura.
Cinco minutos antes del comienzo del pleno, Sánchez entraba rodeado de los suyos. Su sonrisa reflejaba el éxito de un plan que ha necesitado el encaje de muchas piezas. Tanto es así, que el presidente en funciones no ha sido capaz de fraguar el acuerdo hasta apenas una hora antes de que la votación empezase.
Finalmente, el separatismo ha concedido sus apoyos a la candidata socialista. El precio, lejos de gratuito, pasa por un proceso de «desjudicialización del conflicto político entre Cataluña y el Estado», entre otras promesas.
Tanto Junts como ERC han votado su decisión durante la mañana del jueves antes del comienzo del pleno en el Congreso de los Diputados. En los últimos días, las negociaciones se han hecho en total secretismo, sin filtraciones pero aderezadas con un goteo de declaraciones del expresidente catalán Carles Puigdemont, que tensó la cuerda hasta la tarde anterior, cuando avisó de que el acuerdo precisaba «hechos comprobables».
Gabriel Rufián, portavoz de ERC en el Congreso, ha sido el encargado de anunciar su acuerdo con el PSOE a cambio de el futuro Gobierno garantice las lenguas cooficiales en las sesiones plenarias y una comisión de investigación sobre el caso Pegasus, el espionaje a políticos independentistas.
Concretamente, el trato incluye la creación de una ley orgánica «para que el catalán sea lengua plenamente oficial» en todas las instituciones del Estado «incluida la Justicia donde, según ha destacado Rufián sigue habiendo muchos déficits». Por otro lado, según lo comunicado por Esquerra, «el Estado se compromete con el fin de la represión relacionada con el 1-O contra el independentismo por las vías legales necesarias».
Camino a la investidura
El resultado se convierte en un preludio de lo que puede ocurrir de cara a la sesión de investidura. El resultado de la elección de la presidenta de la Mesa del Congreso muestra un acercamiento de posturas entre el PSOE y los múltiples partidos de los que necesita para permanecer en La Moncloa.
Sin embargo, el resultado no es definitivo y los separatistas ya han advertido que se trata de negociaciones separadas. En las próximas semanas, el candidato socialista reunirá de nuevo a las fuerzas de izquierda e independentistas con la intención de cerrar un acuerdo con el que convertirse en presidente del Gobierno.
Vox se vota a sí mismo
El partido dirigido por Santiago Abascal no ha votado a favor de la candidata del Partido Popular, Cuca Gamarra. La formación ha optado por votar a su candidato a la presidencia de la Mesa, Ignacio Gil Lázaro.
El partido ha comunicado que su votación ha sido consecuencia de una conversación previa al pleno con el Partido Popular que «ha confirmado que no ayudará a Vox a conseguir un puesto en la Mesa». «Es la segunda vez en democracia que la tercera fuerza parlamentaria no está representada en la Mesa y, ante esa falta de voluntad del Partido Popular, Vox vota a su candidato a la presidencia y a la vicepresidencia. En ambos casos Ignacio Gil Lázaro», han sentenciado.