Vox sale del hemiciclo en protesta por las lenguas regionales y deja los pinganillos en el escaño de Sánchez
«No vamos a ser cómplices de esta ruptura de nuestra convivencia», ha defendido la portavoz parlamentaria, Pepa Millán, que ha recriminado a Armengol que permita hablar en otras lenguas cuando todavía la iniciativa no ha sido aprobada
Vox ha abandonado el hemiciclo durante el Pleno, el primero de la nueva legislatura, en el que se debate la toma en consideración de la proposición de reforma del Reglamento del Congreso planteada por el PSOE, Sumar y sus socios independentistas para implantar el uso de las lenguas cooficiales en la Cámara Baja, al considerar que se ha incumplido el reglamento, dado que todavía no se había debatido ni votado la citada reforma.
La portavoz parlamentaria de Vox, Pepa Millán, ha pedido la palabra durante la intervención del diputado del PSOE, José Ramón Besteiro, que estaba utilizando el gallego para exponer la iniciativa, y tras la negativa de la presidenta del Congreso, Francina Armengol, a concedérsela, el grupo de Santiago Abascal ha abandonado el hemiciclo y a su salida, los 33 parlamentarios del partido han dejado los pinganillos sobre la mesa de Pedro Sánchez, que se encuentra en Nueva York.
Ante los medios, Millán ha recalcado que la iniciativa que se está tramitando todavía no ha sido aprobada y le ha recriminado a Armengol que haya permitido que ya se hable en una lengua distinta al español. «A lo que estamos asistiendo, en definitiva, es a una exaltación de la división, a una exaltación de un enfrentamiento con el dinero de todos los españoles», ha denunciado la portavoz.
«Nosotros no vamos a ser cómplices de esta ruptura de nuestra convivencia que al final es lo que pretenden escenificar rompiendo absolutamente todas las leyes y pasándose el reglamento por el forro de la chaqueta», ha asegurado Millán.
Santiago Abascal ha cargado en redes sociales contra los que «pervierten nuestras lenguas utilizándolas contra el entendimiento, contra la convivencia, contra la ley» y ha defendido la actuación de su grupo parlamentario: «Creo que millones de ellos (de españoles) querían que hoy le arrojáramos a Sánchez su artefacto de odio y de división». Y ha advertido: «Tomemos nota de estos pasos preparatorios para el nuevo golpe, que tratarán de dar desde la Moncloa».
La pasada semana Vox anunció una enmienda a la totalidad contra la iniciativa de los partidos del Gobierno en funciones, y este lunes, registró una proposición de reforma del Reglamento del Congreso para que, entre otras cosas, se blinde el uso del español como única lengua permitida en el ejercicio parlamentario.
En el texto, el partido pide concretamente modificar el artículo 15 de este reglamento para que en él se recoja que «los diputados están obligados a utilizar el español en el ejercicio de su actividad parlamentaria, tanto en sus intervenciones orales como en los escritos que presenten en el Congreso».
Diputados del partido de Abascal habían vuelto cuando iba a comenzar a intervenir desde la tribuna el parlamentario del Partido Popular Borja Sémper, y al escuchar que, de forma sorpresiva, este pronunciaba unas frases en euskera, han vuelto a salir del hemiciclo.