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Los 33 diputados de Vox dejan sus pinganillos en el escaño de Sánchez a su salida del hemicicloGuillermo Sánchez | VOX

Vox se querella contra Armengol al permitir usar las lenguas regionales antes de aprobarse la reforma

La formación de Abascal denuncia que la presidenta del Congreso actuó «al margen de la legalidad, a sabiendas, y con clara voluntad de infringir» el Reglamento de la Cámara

el partido de Santiago Abascal ha presentado este miércoles una querella ante la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo contra la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, por prevaricación, como adelantó el secretario general de la formación, Ignacio Garriga, el pasado lunes en rueda de prensa.

Tras los plenos del martes y el jueves en los que se debatía la toma en consideración y se aprobaba, respectivamente, la proposición de reforma del Reglamento de la Cámara Baja para permitir el uso de las lenguas cooficiales en la actividad parlamentaria, como pedían los socios separatistas del Gobierno en funciones, Vox había manifestado que estudiarían acciones legales contra lo que calificaron de «flagrante incumplimiento de la legalidad» por parte de la Mesa del Congreso, dado que en ambas sesiones se había empleado el sistema de traducción simultánea antes de que estuviera aprobada la reforma para tal efecto.

De hecho, en señal de protesta, los 33 diputados del grupo parlamentario de Abascal abandonaron el hemiciclo dejando sobre el escaño vacío de Pedro Sánchez sus pinganillos cuando intervenía, en gallego, el diputado socialista encargado de defender la proposición.

Así, en el escrito presentado este miércoles ante el Alto Tribunal la responsable jurídica del partido, Marta Castro, denuncia que se permitiera la utilización de las lenguas regionales, no conocidas por todos los miembros de la Cámara, antes de que se hubiera modificado el reglamento ni se hubiera publicado en el BOE para su entrada en vigor. En este sentido, Vox señala que se realizó «sin cobertura legal y sin poder certificar la autenticidad de las interpretaciones», «impidiendo así el correcto ejercicio de representación democrática».

Según recalca en su querella, Armengol actuó «al margen de la legalidad, a sabiendas, y con clara voluntad de infringirlo (el reglamento)», pese a que los diputados de Vox le advirtieron de forma expresa que estaba cometiendo una infracción, pues la portavoz parlamentaria, Pepa Millán, quiso intervenir pero la presidenta de la Cámara le negó la palabra. Por ello, critican que continuara con la sesión «permitiendo y alentado los hechos, incluso participando en ellos».

La formación de Abascal ha solicitado al Supremo que interrogue a Armengol, libre de oficio al Congreso para que verifique la veracidad de las pruebas que le aportan y solicite el diario de sesiones del 19 de septiembre (el pasado martes). También, ha requerido la proposición inicial y los informes jurídicos y técnicos que se pusieron a disposición de la Mesa del Congreso y de los diputados en la tramitación de la reforma impulsada por el PSOE, así como la copia del acuerdo adoptado por el órgano de gobierno de la Cámara por el que se autorizaba el uso de las lenguas y todo el material que da cuenta de la contratación de los utensilios y los personales de traducción.