Audiencia Nacional
El juez de Tsunami admite la personación de un tercer policía lesionado en la causa que investiga por terrorismo
El magistrado Manuel García-Castellón ha recogido el escrito remitido por un agente que, como sus dos compañeros de la UIP, también resultó herido durante los altercados contra la sentencia del ‘procés’
El juez instructor de Tsunami Democràtic, el magistrado Manuel García-Castellón ha admitido la personación de un tercer policía herido durante las graves protestas de 2019 en Cataluña, contra la sentencia del Supremo que condenó a los cabecillas políticos del procés, en la causa que se sigue en la Audiencia Nacional por un delito de terrorismo y en la que han sido imputados tanto el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, como la entonces número dos de ERC, Marta Rovira.
Así las cosas, y según ha podido saber El Debate, el agente queda incorporado en la instrucción judicial que se sigue contra la plataforma Tsunami, en calidad de acusación particular en la que ya figuran otros dos agentes de la Policía Nacional miembros de la UIP que, según ellos mismos denunciaron antes el magistrado, resultaron heridos, el 18 de octubre de 2019, en Barcelona, durante las protestas convocadas contra las condenas de prisión a los líderes separatistas catalanes del procés.
Los tres funcionarios se han presentado como víctimas de «actos de terrorismo callejero». Una calificación jurídica de la que discrepa la Fiscalía, tras un polémico cambio de criterio, en dos informes contradictorios que revelaba en exclusiva, El Debate, y que el propio juez instructor neutralizaba este martes pidiendo al Supremo que asuma la investigación por delito terrorista que pesa sobre Carles Puigdemont, Marta Rovira y un total de veinte personas más.
Al igual que se recogía en las conclusiones aportadas por los investigadores de la Guardia Civil, en el informe remitido al instructor de la causa de Tsunami Democràtic, los policías personados - que formaron parte del dispositivo de seguridad desplegado ante la Jefatura Superior de Policía de la Via Laietana- atribuyen a los «disturbios» que se produjeron en Cataluña la categoría de un «estilo de terrorismo urbano o kale borroka» protagonizada por «sectores radicales violentos».
Los manifestantes concentrados, en octubre de 2018, en Barcelona protagonizaron «intensos ataques» contra los agentes recurriendo al uso de «adoquines, piedras, bolas metálicas de petanca, bengalas, cócteles molotov, ácido y material metálico de bricolaje» con la intención «evidente», para los policías personados «de producir el mayor número de bajas posibles» entre los funcionarios de los Cuerpos de Seguridad del Estado. Un relato que reforzaría la acusación provisional de terrorismo que mantiene el juez instructor García-Castellón, en contra de la tesis del Ministerio Fiscal.