Las familias de los militares que fallecieron en Cerro Muriano denuncian a más mandos

Se van conociendo nuevos datos del terrible fallecimiento de dos militares en Cerro Muriano en Córdoba el pasado 21 de diciembre. En el ejercicio de flotabilidad participaron 75 personas, pero sólo entraron en el agua 15 de ellos. El lago estaba turbio y muy frío. Tenía unos tres metros de profundidad.

Era primera hora de la mañana. El capitán ordenó que entraran en el agua con todo el equipo encima. Ataron una cuerda de un árbol a otro, pero no era una línea de vida como tal porque los militares no llevaban arneses ni mosquetones que les impidieran hundirse. Solo era una cuerda para agarrarse si se hundían. Nada más.

El capitán además dio orden de que solo podían agarrarse en caso de vida o muerte. Hubo quienes se agarraron, pero al parecer el mando dio orden de que se soltara la cuerda de uno de los árboles. la cuerda salió lanzada e hizo de látigo. Según el abogado de una de las víctimas: «El cable debería haber sido de acero con anillas y arneses y no fue así».

La familia de uno de los militares también denuncia que no había ambulancia ni socorristas ni salvavidas. Y que el trasporte médico tardó 15 minutos en llegar. Hacía tanto frio que a los militares se les bloqueaba la mandíbula y no podían ni hablar. «También se les dormían las piernas. Además, como castigo por haber hecho mal un ejercicio, les habían metido minas de más de tres kilos de peso».

El abogado de uno de los fallecidos ha anunciado hoy mismo en rueda de prensa que va a ampliar la denuncia presentada contra el capitán por homicidio con dolo eventual: también va a incluir a otros cargos y al propio ministerio de Defensa.