Recepción al Cuerpo Diplomático
El Rey: «Las víctimas del terrorismo deben ocupar un lugar central en las políticas de Estado»
El embajador de Rusia se ausenta de la recepción al Cuerpo Diplomático que han ofrecido los Reyes en el Palacio Real y a la que sí han acudido los representantes de Israel y Palestina
El Rey ha afirmado este miércoles que «las víctimas del terrorismo deben ocupar un lugar central en las políticas de los Estados». Don Felipe ha hecho estas afirmaciones ante el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la tradicional recepción al Cuerpo Diplomático que ha ofrecido en el Palacio Real acompañado por la Reina.
El Jefe del Estado se ha referido a las víctimas del terrorismo con motivo del vigésimo aniversario de los atentados del 11-M, y en un momento en el que el terrorismo sigue marcando la política española, ya que los socios del Gobierno pretenden que estos delitos también se vean beneficiados por la amnistía que prepara Pedro Sánchez.
Tras recibir el saludo de cada uno de los invitados, el Rey ha pronunciado un discurso ante todos ellos en el Salón del Trono, donde ha pedido «un alto al fuego duradero» en Gaza. Don Felipe ha afirmado que «la tragedia que vive Gaza está estremeciendo la conciencia de la Humanidad, como también lo hizo el execrable atentado terrorista que sufrió Israel el pasado 7 de octubre, y que merece nuestra más enérgica condena».
A la recepción en Palacio han asistido más de cien embajadores entre ellos los de Israel y Palestina; pero la ausencia más llamativa ha sido la del embajador de Rusia, Yuri Klimenko, que presentó sus cartas credenciales el pasado abril ante el Rey en una discreta ceremonia, pero no ha acudido a la cita.
Tras referirse a la tragedia de Oriente Medio, el Rey condenó la invasión de Ucrania por parte de Rusia, y la calificó de «invasión no provocada, injustificada e injustificable». Y añadió que España seguirá trabajando para lograr «una paz global, justa y duradera».
Además, aludió al 75 aniversario de la creación de la Alianza Atlántica, y aseguró que España «seguirá participando en la disuasión y en la defensa colectiva en el flanco oriental, con un nuevo destacamento en Eslovaquia, asumiendo el liderazgo de la brigada multinacional de la OTAN en el país. y con otro contingente en Rumanía».
En la ceremonia, el Rey ha estado acompañado por el presidente del Gobierno y el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quienes tras saludar a Don Felipe y Doña Letizia han permanecido en un discreto segundo plano en el salón.
A la Reina se le cayó la pulsera
Entre otras anécdotas que se han producido durante la ceremonia, a la Reina se le ha caído al suelo la pulsera de brillantes que llevaba y ha tenido que agacharse a recuperarla y posteriormente el Rey le ha ayudado a ponérsela.
Otra anécdota tradicional la ha protagonizado el embajador de Irán, que un año más ha evitado estrechar la mano de Doña Letizia, al ser mujer. Pero en este caso, lo ha sustituido por un respetuoso gesto.
Además, el embajador de Japón ha sufrido un resbalón cuando se acerba a saludar a los Reyes, pero ha conseguido mantener el equilibrio,