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El expresidente del Gobierno y presidente de FAES, José María AznarEuropa Press

La fundación de Aznar denuncia que el «engendro del 'Frankenstein'» ha perdido «el control del tinglado»

Desde FAES también han expresado que ​«el sanchismo es una expresión inconcebiblemente sectaria de confusión total entre partido, gobierno y Estado»

La Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) –entidad presidida por el exlíder del Ejecutivo José María Aznar– ha asegurado en sus últimas Anotaciones que «la convocatoria anticipada de elecciones en Cataluña funciona como un reactivo que revela el precario atadijo de contradicciones oportunistas conocido por sanchismo». Así las cosas, desde esta organización han indicado que en las elecciones generales del pasado 23 de julio de 2023 surgió «un Frankenstein ampliado, como mayoría de gobierno» que «va desmontando el Estado y diluyendo la nación».

«Como engendro, es poco viable a la larga: los monstruos no suelen ser longevos. La cuestión es cuál de esos dos procesos culmina antes», han agregado a renglón seguido.

Asimismo, la fundación encabezada por Aznar que también han argumentado que «los nervios de Sánchez delatan que ha perdido el control del tinglado. Mientras la gobernabilidad era cuestión de ir saciando la voracidad de sus socios, podía girar cheques a cuenta de terceros: los contribuyentes, los territorios de color popular o, directamente, la dignidad nacional».

En consecuencia, FAES también ha subrayado que «la convocatoria catalana cambia esa rutina: ahora son sus socios principales los que van a competir: habrá damnificados, y Sánchez los necesita a todos», y por ello «a pocas horas del anuncio de la convocatoria catalana, el PSOE ya descarta aprobar unos Presupuestos para este año» e «incluso trata de convencernos de que es mejor así».

El expresidente del Gobierno y presidente de la Fundación FAES, José María AznarEuropa Press

«El sanchismo es una expresión inconcebiblemente sectaria de confusión total entre partido, gobierno y Estado. La degradación institucional a que da lugar se actualiza ahora con otra práctica corrosiva hecha costumbre. Desde 2018 se prorrogan presupuestos como si tal cosa, al margen de toda previsión constitucional. Sánchez empezó prorrogando unas cuentas populares pocos meses después de haber denunciado tal recurso como propio de ejecutivos inermes. Ahora, los intereses electorales de ERC y Junts dejan sin Presupuestos para este año al Estado. No parece importar, siempre que no dejen a Sánchez sin el BOE», zanja escrito.