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Yolanda Díaz y Ernest Urtasun en el CongresoEFE

Divide y vencerás

El PSOE hurga en la debilidad de Yolanda Díaz y promociona a Ernest Urtasun frente a ella

El ministro de Cultura, la cuota de los Comunes en el Gobierno, ha comparecido dos veces en la Moncloa en el último mes, en contraste con lo desdibujada que está la líder de Sumar

La vieja máxima del divide y vencerás nunca pasa de moda en la política española. El PSOE se la está aplicando a Yolanda Díaz en el momento de mayor debilidad de la líder de Sumar, que ha intentado ocultar bajo la alfombra de la asamblea fundacional del partido. Los socialistas están promocionando la figura del ministro de Cultura y portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, en detrimento de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo. Con el agravante de que Urtasun, la cuota de Catalunya en Comú en el Gobierno de Pedro Sánchez, de momento es uno de los principales apoyos de Díaz en su menguante sociedad limitada.

En el último mes, Urtasun ha comparecido dos martes tras el habitual Consejo de Ministros por decisión del PSOE, que es el que dirige la Secretaría de Estado de Comunicación. En concreto, los días 25 de marzo y 27 de febrero. En la comparecencia del pasado martes, su único cometido fue informar de nuevas subvenciones a las salas de cine para que vuelva a haber entradas a dos euros para los mayores de 65 años los martes.

El ministro de Cultura, en la rueda de prensa del último Consejo de MinistrosEFE

Por el contrario, Díaz lleva sin aparecer en la sala de prensa de la Moncloa desde el 6 de febrero, cuando el Ejecutivo aprobó la subida del salario mínimo interprofesional a 1.134 euros al mes en 14 pagas y un anteproyecto de ley que modifica el Estatuto de los Trabajadores, al transponer una directiva europea. Para más inri, aunque Díaz llevó la negociación con los sindicatos para el incremento del SMI, Sánchez se le adelantó y le reventó la noticia en un mitin de la campaña gallega. Aquel día, el presidente anunció que el Consejo de Ministros siguiente haría efectiva la medida.

En lo que va de legislatura, Díaz solo ha tenido esa aparición en la Moncloa y otra, tras el Consejo de Ministros del 19 de diciembre. Y mejor olvidar aquel día. Porque, a instancias de la ministra de Trabajo, el Gobierno aprobó el decreto ley de la reforma del subsidio de desempleo, que un mes después fue derogado en el Congreso porque Podemos votó en contra, en venganza contra la líder de Sumar. A día de hoy no hay nada nuevo al respecto.

Yolanda Díaz, en un Consejo de Ministros de diciembreEFE

Que el PSOE esté mimando a Urtasun para eclipsar a su propia socia no es casualidad. Nunca lo es. Los socialistas ya utilizaron esa misma estrategia la legislatura pasada, pero en aquel caso para beneficiar a la propia Díaz y borrar a Podemos del mapa. Irene Montero e Ione Belarra, que entonces eran las dos ministras moradas, se pasaron los últimos meses entre tinieblas, castigadas sin aparecer en una sola rueda de prensa del Consejo de Ministros. Por el contrario, Díaz fue de los miembros del Gobierno que más compareció en la Moncloa la legislatura pasada tras la salida de Pablo Iglesias, solo superada por las vicepresidentas Nadia Calviño (ahora en el Banco Europeo de Inversiones) y Teresa Ribera.

Yolanda Díaz lleva dos meses sin comparecer en la sala de prensa de la Moncloa, cuando la legislatura pasada no salía de ella

Entonces, Montero y Belarra se quejaron del ostracismo y Díaz, por el contrario, defendió la política de comunicación del PSOE. «Estamos ante el primer Gobierno de coalición. Ustedes están aprendiendo, nosotros estamos aprendiendo. El Gobierno lo está haciendo bien, funcionamos de forma mancomunada. Y la política de comunicación es de la Secretaría de Estado de Comunicación», afirmó en abril de 2023, cuando las ausencias de las ministras de Podemos eran ya clamorosas.

De momento, Díaz tiene en Urtasun a un aliado. El lunes, el también portavoz de Sumar reivindicó a su jefa de filas como el «alma progresista del Gobierno». No obstante, hasta hace meses la gallega también creía que Ada Colau lo era. Después, Colau abocó al presidente de la Generalitat de Cataluña a adelantar las elecciones al quedarse sin Presupuestos. Y al alcalde de Barcelona, a someterse a una cuestión de confianza que perdió el pasado miércoles.

El día después de que Pere Aragonès convocara a los catalanes a las urnas el 12 de mayo, la vicepresidenta segunda se dejó ver largo rato junto a Urtasun en el Pleno del Congreso, sentada en el escaño de al lado del ministro de Cultura. Para entonces, a la socia de Sánchez le estaban lloviendo críticas por no haber sido capaz de interceder ante los Comunes para evitar que la legislatura catalana volara por los aires. Y ella quiso responder acercándose al hombre de los Comunes en Madrid.