Fundado en 1910

El líder de Bildu, Arnaldo Otegi, el candidato a lendakari, Pello Otxandiano, y Maddalen IriarteEuropa Press

Elecciones País Vasco 2024

Estos son los postulados radicales de Bildu

La formación que ha empatado en primer lugar con el PNV en los comicios autonómicos se ha comprometido a lograr un «reconocimiento nacional» del País Vasco para antes de 2028

Durante la campaña electoral, el candidato de Bildu, Pello Otxandiano, calificó a ETA como un «grupo armado» en vez de «banda terrorista». Tan solo dos días después el dirigente de la izquierda aberzale realizó un intento de disculpa condicionado, ya que –sin rectificar sus palabras– aseguró que pedía «perdón» si pudo «herir la sensibilidad de las víctimas». Este acontecimiento pone sobre la mesa las radicales ideas que tiene Bildu –que ha empatado con el PNV a 27 escaños– para después de este domingo 21 de abril.

En su programa electoral, la coalición liderada por Arnaldo Otegi en ningún momento se refiere al País Vasco como un territorio autónomo. Por ende, se habla de «esta parte del país», ya que para Bildu solo existe la quimera de Euskal Herria, una región que, según sus postulados, incluye al País Vasco, Navarra y el País Vasco francés o Iparralde. «Al igual que en el conjunto de Euskal Herria, también en esta parte del país tenemos una desventaja estratégica para hacer frente a los problemas cotidianos: a Euskal Herria se le niega el derecho a la soberanía», dictaminan.

Así, aunque en todo el programa no se menciona la palabra «independencia» ni una sola vez, se deja ver de manera clara que Bildu tiene como objetivo la ruptura con España, algo completamente ilegal de acuerdo a la actual Constitución. En consecuencia, se comprometen para 2028 a lograr un «reconocimiento nacional» –dado que «somos una nación»–; y a la «materialización jurídico-política del derecho a decidir en lo relativo a políticas públicas y al futuro de este pueblo».

Para esta legislatura también desean crear una «relación de carácter confederal basada en la bilateralidad que pueda desarrollarse sin ninguna subordinación al Tribunal Constitucional, al Congreso español o a los tribunales españoles y sin ninguna injerencia por parte de los mismos». Además, Bildu se compromete a que, «antes de iniciar cualquier negociación con el Estado», se realice una «consulta habilitante».

En clave económica

Las políticas económicas del partido del que forma parte Sortu también se centran en potenciar de manera exclusiva la región, aunque con un claro carácter socialista. Así, promulgan «asumir el liderazgo» en «fiscalidad», y para ello «estudiar la opción de formar una Hacienda Única entre los Territorios Históricos», y materializar una «reforma completa del Impuesto de Sociedades, a fin de que las empresas tributen en un nivel razonable coincidente con los beneficios realmente obtenidos (entre otras cosas, estableciendo una tasa impositiva mínima real».

En materia financiera, desde Bildu planean desarrollar el «Instituto Vasco de Finanzas, para poder contar con un banco público en el futuro», e incluso expresan de soslayo la posible nacionalización de Kutxabank, debido a que consideran que deben «trabajar en favor del control público» de esta entidad bancaria. «Desde una actitud responsable y comprometida respecto al interés general de la ciudadanía vasca, se deben analizar todas las vías para que las instituciones recuperen el control de lo que puede ser un instrumento de financiación de gran capacidad, a fin de impulsar el desarrollo económico y social de nuestro pueblo», afirman sobre este extremo.

La estrategia de la izquierda aberzale en cuanto al turismo también aúna su deseo de independencia junto a su visión «progresista». En consecuencia, piden establecer una «limitación de las viviendas de uso turístico», a la vez que una «activación de la oferta Euskal Herria-Basque Country». Por consiguiente, aseveran que «se desarrollará, conjuntamente con Nafarroa e Iparralde, la imagen de Euskal Herria como elemento principal de la oferta turística, fomentando la proyección de la identidad, de la lengua, de las tradiciones vascas, de la gastronomía, etc., como elemento estructurador del atractivo turístico». «Poner en marcha una propuesta dirigida a jóvenes para que disfruten de vacaciones sostenibles y en Euskal Herria», añaden.

Respecto al sector primario, Bildu sostiene que tienen que dirigirse «hacia la soberanía alimentaria» porque «un 90 % de los alimentos que se consumen en Euskal Herria viene del exterior» y «el modelo agroindustrial globalizado ha fracasado». Igualmente, promulgan la «creación de un sistema público para procesar y distribuir alimentos locales y de temporada por comarcas, tomando como eje un modelo diversificado y planificado».

El programa de Bildu también señala que quiere «fortalecer la estructuración» de «Euskal Herria en el mundo», para lo que «crearemos la escuela de acción exterior con el propósito de conformar una red de profesionales que gestione con perspectiva internacional la Escuela Vasca de Diplomacia» y «asegurar representantes de Euskal Herria en todas las instituciones internacionales para defender nuestros intereses ante las instituciones de la Unión Europea y fomentar la presencia directa de estas en nuestro territorio».

«Fundar la Eurozona Vasca y hacer uso de las opciones para avanzar como nación, con el fin de fortalecer las relaciones con la Comunidad de aglomeración del País Vasco y la Comunidad», expresan.