El expresidente catalán Carles Puigdemont, en el Parlamento Europeo
En el asiento de atrás
Puigdemont desmiente la historia de su fuga: «Nunca me he metido en ningún maletero»
El candidato de Junts responde al líder de UGT en Cataluña, que se mofó de que fuera «cagado». Según Puigdemont, fue todo un invento de las «cloacas del Estado» para «justificar su incompetencia».
Seis años y medio después de huir de la Justicia, Carles Puigdemont ha negado este viernes que cruzara la frontera con Francia escondido en el maletero de un todoterreno, el 29 de octubre de 2017.
El expresidente de la Generalitat y candidato de Junts a las elecciones catalanas ha colgado un mensaje en la red X en respuesta a unas declaraciones previas del líder de UGT en Cataluña, Matías Carnero. Durante un mitin con Salvador Illa, Carnero se mofó de que Puigdemont se fugó a Bruselas «llorado» en el maletero, «y no sé si cagado o meado».
«Nunca me he metido en ningún maletero, y lo saben, pero lo repiten igual que los de la cloaca repiten que la mujer del presidente tiene negocios turbios», señala Puigdemont. Según éste, las «cloacas del Estado» se inventaron esa «mentira» porque no fueron capaces de detenerlo antes de llegar a Bruselas. «Se inventaron lo del maletero para intentar justificar su incompetencia (o nuestra habilidad de evitar una detención segura)».
La versión de Puigdemont es que él cruzó la Junquera en el asiento de atrás de un coche con las lunas tintadas. En el libro que publicó en 2018 narraba: «Me senté en el coche y viajé por Francia con toda normalidad, hasta llegar a Bélgica (por Luxemburgo). Tampoco cogí ningún avión en Marsella , como se insinuó. Es increíble que la gente se invente cosas así».
Lo que sí quedó demostrado en una investigación de Asuntos Internos de los Mossos d’Esquadra es que le ayudaron en su huida dos de sus escoltas, un matrimonio de mossos y su mujer, Marcela Topor.