Los «colegas fascistas» responden a Montero: no informó del coste de su desplazamiento en Falcon en Estados Unidos
La exministra de Igualdad se negó a responder a la pregunta en un debate de la Universidad Autónoma de Madrid sobre las elecciones europeas e insultó a este periódico
«Mira, tienes un montón de colegas fascistas que llevan cuatro años metiendo preguntas por el portal de transparencia, así que le pides a tus colegas la respuesta». Esta fue la contestación de la candidata de Podemos a las elecciones europeas y exministra de Igualdad, Irene Montero, cuando en un debate en la facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Madrid le preguntaron por «su viaje de 45 minutos de duración entre Washington y Nueva York en el Falcón pagado con el dinero de los españoles». La pregunta sacó de quicio a la candidata y en lugar de dar las explicaciones pertinentes para acallar las críticas optó por el insulto.
Y es que, El Debate fue uno de los medios que se interesó por el viaje de varios miembros del Ministerio de Igualdad en junio de 2022 y por ello preguntó a la por entonces ministra y ahora candidata por Podemos al Parlamento Europeo el coste total de la excursión para las arcas públicas. Esa y otras preguntas han sido formuladas por periodistas a los que Montero califica como «los colegas fascistas».
Sin embargo, la respuesta que ofreció la entonces ministra tampoco daba contestación a la pregunta que le plantearon en el debate electoral pues entonces no explicó las razones que le llevaron a realizar la gira por Estados Unidos, desde Washington hasta Nueva York.
De hecho, cuando se le solicitaron «los documentos, cualquiera que sea su formato, acreditativos de la necesidad o conveniencia de la realización de dicho viaje», desde el departamento dirigido por Montero aseguraron que «no existen los documentos requeridos», pues «los miembros del Gobierno determinan la conveniencia de cada viaje en función de los intereses generales del país conforme a las líneas de la acción política nacional e internacional».
Además, añadieron que «la agenda feminista y los derechos reproductivos de las mujeres es una de las prioridades de este Departamento», una coletilla que venía al caso, pues en aquel momento el Tribunal Supremo de EEUU derogó el derecho al aborto, emitiendo una sentencia en la que declaraba que ésta es una decisión que compete exclusivamente a los estados.
Junto a ello, Igualdad explicó respecto al empleo del avión Falcon, «que una de las misiones del Ejército del Aire, como parte de la Acción del Estado, es el transporte de autoridades, sufragándose con cargo al presupuesto ordinario. Esto hace que no se puedan disociar los costes de determinadas actividades o desplazamientos concretos del cómputo general».
Así pues, en la información que remitió entonces no se hacía alusión ninguna al desplazamiento entre Washington y Nueva York, ni acerca del coste que ello supuso para las arcas públicas, pues el Gabinete de la ministra únicamente especificó los gastos de la delegación ajenos a los desplazamientos aéreos.
Tras visitar la Casa Blanca
Montero alardeó de que su ley del 'solo sí es sí' era «ejemplo» para Biden en su viaje a EE.UU.
En concreto, en la documentación oficial sí aparecen los gastos de alojamiento de Irene Montero, Isa Serra, Ángela Rodríguez y Lidia Rubio, que ascendieron a 4.414,64 euros, a lo que hay que añadir alrededor de 225 euros en manutención, pues en total se destinaron a tal fin 224,24 dólares.
Además, se gastaron 19 euros en una atención protocolaria y, en los documentos a los que ha tenido acceso El Debate, se añaden otros 506,55 dólares en concepto de 'transfer'.
Entre los demás costes que sí reconoce Igualdad a este periódico figura, como una de las partidas más cuantiosas y también más sorprendentes, la destinada a los gastos de traducción de la comitiva, que ascendió a un total de 3.757,98 euros.
De esta manera, el ministerio, al obviar el coste de los desplazamientos, ‘recortó’ de cara a la galería el gasto que supuso el viaje que comenzó en Washington, donde Montero se reunió en la Casa Blanca con el asistente especial sobre Justicia Racial y Equidad del presidente de los Estados Unidos, Chiraag Bains, y con la directora ejecutiva del Consejo de Políticas de Género de la Casa Blanca, Jennifer Klein.
Después, y montada en el avión oficial, se desplazó a Nueva York, donde se reunió con la secretaria general adjunta de las Naciones Unidas y directora ejecutiva de ONU Mujeres, Sima Bahous, y con la directora de Asuntos de la Mujer del Estado de Nueva York, Emily Kadar. No sin antes dejar para el recuerdo una de las imágenes más polémicas de su mandato, la de todas las integrantes de la delegación del ministerio en Times Square.