España se ha convertido en la inalcanzable piedra preciosa del cártel de Sinaloa

España es la joya preciosa para el cártel de Sinaloa, la organización delictiva más importante del mundo, por su volumen de 'negocio' y por la violencia con la que se hizo con el control del tráfico de droga de toda la frontera de México con Estados Unidos. Y prueba de ello es que, por más veces que sea desmantelada su infraestructura en nuestro país, siempre vuelven a intentarlo. De hecho, el pasado jueves se desmanteló por tercera vez.

España nunca ha dejado de ser la puerta de entrada para la droga en Europa. El frecuente comercio con Sudamérica por tradición cultural y porque los puertos españoles, el de Algeciras y Valencia por ser los más grandes de España, son los más cercanos a América. Así que es la mejor manera de hacer llegar la cocaína que luego distribuirán por el resto de Europa.

Los primeros indicios de la presencia del cártel de Sinaloa en España se dieron en el año 2010, cuando el FBI alertó a la Policía española de que el cártel de Sinaloa pretendía implantarse en España. Y los estadounidenses tenían razón, dos años más tarde, en 2012 fueron detenidos cuatro mejicanos en Madrid, entre los que se encontraba Jesús Gutiérrez Guzmán, primo del mismísimo ‘Chapo’ Guzmán. Llevaban algo más de un año ensayando el envío de cocaína a Europa a través de contenedores legales de mercancías. Los papeles del FBI y un tren de vida a todo lujo, les dejó en evidencia y en agosto de 2012 cayó el primer intento de cártel de Sinaloa de entrar en España.

Conexión balcánica y la Mocro Maffia

Pero nuestro país es demasiado apetitoso como para dejarlo pasar tras un primer intento. Y a los años, en 2020, volvieron a la carga. Y con ese intento regresó un potente tren de vida que les volvió a señalar. Aunque, en esta ocasión, pretendieron hacerse con el mercado de la marihuana y para ellos establecieron plantaciones en diferentes provincias españolas. También lo intentaron con la cocaína. Y después de traerla simulando que era café, cerraban los negocios con otros traficantes de Croacia y Holanda, la conexión con las mafias balcánicas y con la Mocro Maffia. Esta red cayó en junio de 2022.

El pasado jueves, casi dos años después de la última caída, la Policía volvió a cazarles. En esta ocasión, lo que les delató fue la importación. La organización desmantelada compraba lavadoras y electrodomésticos y las trasladaba a Canarias acompañadas de cocaína. Según explicaron fuentes policiales, les extraño que compraran los electrodomésticos en la Península cuando en Canarias tienen menos impuestos, así que en su investigación descubrieron 24 kilos de cocaína mexicana, que fue la que les llevó hasta un almacén de Villena (Alicante) que es donde guardaban la mayor parte de los 1.800 kilos de metanfetamina que se les incautó, una nueva droga con la que lo intentaron los del cártel de Sinaloa.