Dos teorías posibles
El Gobierno no aclara por qué Sánchez anticipó hace dos semanas el fallo del TC sobre Magdalena Álvarez
El ministro Bolaños carga contra el PP por atacar al Constitucional y a los tribunales cuando no le gustan sus decisiones, después de que Gamarra calificara la decisión de «indulto encubierto».
El Gobierno ni se ha molestado en intentar aclarar por qué Pedro Sánchez anticipó el fallo del Tribunal Constitucional sobre Magdalena Álvarez hace dos semanas. Cuando el presidente, en un mitin en Benalmádena el 5 de junio, se dirigió a la exministra y exconsejera andaluza -allí presente, y no por casualidad- para defenderla y lamentar que hubiera sido «víctima del vil ataque de la derecha y la ultraderecha durante muchos años».
La decisión del Tribunal Constitucional de indultar la prevaricación de Álvarez en el caso de los EREs ha acrecentado los recelos del PP en torno al órgano presidido por Cándido Conde-Pumpido, que en el futuro tendrá que decidir sobre los recursos de inconstitucionalidad contra la ley de amnistía que presenten el PP y sus comunidades.
Y, además, ha enfrentado al principal partido de la oposición con el Gobierno, añadiendo un escollo más al acuerdo para la renovación del Consejo General del Poder Judicial, para el que Pedro Sánchez ha dado a Feijóo el 30 de junio como fecha tope.
Tras conocerse la decisión, Cuca Gamarra compareció en el Congreso para lamentarse de que «el mayor caso de corrupción de la historia de España» vaya camino de ser borrado. Puesto que la decisión de este miércoles abre la puerta a que los expresidentes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán sigan el mismo camino.
La secretaria general de los populares cuestionó el fallo del TC y lo calificó de «sorprendente» e «indulto por la puerta de atrás», porque «entra en una cuestión que no había sido objeto de discusión». Y pidió al presidente del Gobierno explicaciones por lo ocurrido en el mitin de Benalmádena. Gamarra calificó de «sorprendente y alarmante» que Sánchez estuviera aquel día adelantando el fallo de una sentencia o «dando instrucciones» a Conde-Pumpido sobre el sentido en el que ésta tenía que ir.
Poco después, el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, salió al patio del Congreso para afear a Gamarra y al PP que degraden las instituciones y que solo respeten las decisiones de la Justicia y del Tribunal Constitucional cuando les favorecen. Sin embargo, no aclaró por qué Sánchez hizo aquellas declaraciones hace dos semanas. Bolaños lo pasó por alto.
«El PP ataca a los tribunales, y hoy al Tribunal Constitucional, cuando las resoluciones judiciales no les gustan. Y eso es muy peligroso para nuestra democracia, para nuestro Estado de Derecho y dice muy poco de su respeto por las instituciones», señaló, días después de que el presidente y varios ministros cargaran contra el juez de Instrucción Juan Carlos Peinado por citar a declarar como imputada a Begoña Gómez.
El ministro se felicitó por que en España haya un Estado de Derecho «fuerte, sólido y ejemplar» y de que la separación de poderes esté «garantizada».
