La Guardia Civil sostiene que la Diputación exigió a los trabajadores «máximo secreto» sobre el hermano de Sánchez justo antes del registro

Los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que investigan al músico David Sánchez, hermano del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sostienen que la Diputación de Badajoz exigió a sus trabajadores firmar un acuerdo de confidencialidad justo antes de que se practicara el registro policial. El Debate publica hoy el documento, que ya está en manos de la magistrada Beatriz Biedma, titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Badajoz, se firmó antes del registro policial, en el momento en que ya había comenzado la investigación sobre las irregularidades del músico.

El documento menciona la obligación de guardar «la máxima reserva y secreto» en relación a la comisión de investigación que se constituyó para investigar las irregularidades del hermano de Sánchez. Fue redactado por funcionarios del área de Tecnología y Digitalización a petición del presidente de la Diputación, el socialista Miguel Ángel Gallardo, y tuvo que ser firmada por todos los diputados que formaban parte de esa comisión.

«Consciente de la importancia de salvaguardar la confidencialidad y el derecho a la protección de datos de las personas participantes asumo los siguientes compromisos», comienza el documento. Uno de esos compromisos coincide casualmente con la petición que la juez Biedma ha hecho a Hacienda de solicitar las últimas cinco declaraciones de la renta del hermano de Sánchez para poder rastrear el origen de su patrimonio. Menciona expresamente la prohibición de difundir «los datos de carácter tributarios» a los que tenga acceso «si no se tiene el consentimiento expreso del titular». Es decir, de David Sánchez. También se restringe la posibilidad de compartir ningún documento al que se haya tenido acceso.

Sin embargo, el dato que más ha llamado la atención a los agentes de la UCO, que ya han puesto el documento en manos de Su Señoría, ha sido que los firmantes tienen que mantener el secreto hasta el final de sus vidas. «Las obligaciones de confidencialidad establecidas en el presente documento tendrán una duración indefinida y se mantendrán en vigor incluso a la finalización de la comisión de investigación».

La primera persona que firmó el documento fue Ricardo Cabezas, responsable directo de las actividades que lleva a cabo el hermano de Sánchez. De hecho, este fue el diputado que supervisó el montaje a toda prisa del despacho que se creó para que el músico pudiera justificarse ante la juez. Este periódico captó cómo tres operarios de la Diputación transportaban muebles desde el Palacio de Felipe Checa, sede central de la corporación, hasta el piso donde se ha camuflado el lugar de trabajo del hermano del jefe del Ejecutivo. El Debate fotografió a Cabezas vigilando cómo se llevaba a cabo el montaje.

La labor de los investigadores, en este momento, pasa por rastrear el origen del patrimonio del músico, que pasó de 261.000 euros a 1,7 millones tras un viaje que llevó a cabo a Tailandia. Para ello están analizando los cientos de correos electrónicos que intervinieron el pasado miércoles durante el registro policial. En total, se llevaron el contenido de los servidores de ocho direcciones de e-mail pertenecientes a los cargos públicos que tienen trato directo con el hermano de Sánchez.

Además de buscar si las conversaciones que tenían eran sobre actividades laborales están siguiendo el rastro del cobro de algún tipo de sobresueldo o «ingreso extra» que pudiera explicar el aumento patrimonial del músico. David Sánchez, que a día de hoy tiene un sueldo de 55.000 euros, no ha podido justificar en su declaración de bienes la multiplicación de sus bienes. Su patrimonio está conformado por tres viviendas –el piso que se compró en Madrid con sólo veinte años, el de San Petersburgo (Rusia) y el palacete de Elvas (Portugal)– dos vehículos y acciones del BBVA.