Josep María Mainat: «A mi exmujer deberían haberla condenado a 8 años de prisión, 4 son pocos»
El productor musical asegura que la quiere porque es la madre de sus hijos, pero que no le perdona
Josep María Mainat, miembro de la Trinca, y famoso productor musical, se ha plantado delante de la sentencia que condena a su exmujer con serenidad y profundo autocontrol. Los hechos se remontan a junio de 2020. Fue entonces cuando, mientras el empresario dormía, Ángela, su esposa entonces, «me pinchó algo que yo no le había pedido. Por eso, cuando me recuperé del coma, verbalicé que me había querido matar».
Mainat salvó la vida porque Ángela llamó al 112 a pedir ayuda. Fue detenida y acusada de intento de homicidio. Hace pocas horas se ha conocido la sentencia y Mainat, desde el aplomo y la serenidad, la ha analizado. ¿Qué siente hacia la persona que trató de arrebatarle la vida? «Puedo perdonar las mil barrabasadas que me ha hecho antes de aquella noche, como romperme un bote de cristal en la cabeza, pero intentar quitarme la vida no se lo puedo perdonar».
El creador de Operación Triunfo afirma: «Yo sigo queriendo a Angela, es la madre de mis hijos. Fui muy feliz con ella durante años. Pero me sabe mal que su cerebro le dijese que me asesinase». ¿Qué hay detrás de aquel intento de arrebatarle la vida? «Tiene mucho que ver el consumo de drogas y las compañías tóxicas que frecuentó cuando se fue de mi lado. Aunque los informes médicos dicen que no tiene una enfermedad mental, quizá no la tenga con nombre, como esquizofrenia o lo que sea, pero sí tiene brotes psicóticos y en un momento dado, sin encomendarse a Dios o al diablo, decide que me tiene que matar y eso no se lo voy a perdonar».
Detrás de este comportamiento delictivo, además de una mente enferma, según Mainat, están las drogas: «Ella empezó a consumir cocaína hace seis o siete años. Lo hacía en pequeñas cantidades, luego cada vez más y más. Ella tiene una predisposición a engancharse, algo psicológico de ella. Dejó de tomar cocaína porque se le perforó el tabique nasal y tuvo que recurrir a drogas más fuertes como el éxtasis y la metanfetamina. Esas sustancias fríen el cerebro. Estuvo en centro desintoxicación, pero no funcionó».
El productor musical sabe que Ángela no está bien, aun así considera que la justicia ha sido blanda con ella. «Si una persona quiere matar a otra, lo ha hecho todo para matarla y se arrepiente en el último minuto, la responsabilidad penal de esa persona queda totalmente eximida. La pena de intento asesinato queda rebajada a cero». Mainat pone un ejemplo para que se entienda: «Si me da cinco puñaladas y se arrepiente en el último momento y me salva la vida, eso no tenga reproche penal y me parece fatal". Por esa raón Angela ha sido condenada por lesiones y no por tentativa de asesinato.
«Es cierto que Ángela me salvo la vida, voluntaria o involuntariamente, porque llamó a urgencias. Pero para mí la pena de cuatro años de cárcel que le han puesto por lo que me hizo es blanda», reconoce sin odio Mainat. «En mi opinión, una condena justa hubiese sido ocho años de prisión. Tratamos de pactar esa cantidad antes del juicio, pero no quiso. Aun así, es complicado para mí, porque no soy jurista ni decido las penas».
A pesar de que hubiese deseado mayor dureza, Mainat anuncia: «No voy a recurrir porque se ha dado por probado el intento de asesinato. Eso era importante para mí». El productor y su exmujer estarán unidos de por vida a través de los hijos que tienen en común. Él, mientras que Ángela no esté curada, luchara porque cada comunicación con ellos sea supervisada. Sin duda son lo que más quiere.