Fundado en 1910
Un guardia civil durante un desfile por el 12 de octubre en Pamplona

Un guardia civil durante un desfile por el 12 de octubre en PamplonaPablo Ojer

¿Por qué a la Guardia Civil se le llama Benemérita?

Este viernes se cumplen 95 de la concesión de este título

Dice el Diccionario de la Real Academia de la Lengua que Benemérito significa «digno de galardón». Y en su segunda acepción menciona únicamente a la Guardia Civil. Es decir, la Guardia Civil es la única institución merecedora a título específico de Benemérita más allá de su significado genérico.

Precisamente este viernes se cumplen 95 años desde que la Guardia Civil ostenta este título que adquirió mucho más tarde del momento de su creación por parte del navarro Francisco Javier Girón, duque de Ahumada en 1844.

Fue el 4 de octubre de 1929 cuando el general Primo de Rivera concedió a la Guardia Civil la Gran Cruz de la Orden Civil de la Beneficiencia, con distintivo negro y blanco, por «los innumerables actos y servicios abnegados, humanitarios y heroicos» que los individuos pertenecientes al mismo habían realizado en catástrofes como incendios, inundaciones y salvamentos de náufragos.

Según la modificación a la que fue sometido este reconocimiento en 1910, el distintivo negro y blanco implicaba el tratamiento de Ilustrísima, pero a la Guardia Civil se le concedió el título de «Benemérita».

Dice la Guardia Civil que «el carácter benemérito o benefactor del Cuerpo forma parte de su naturaleza desde su creación y ha sido una constante a lo largo del tiempo con numerosas conductas reconocidas a miembros a título personal».

Y añade que «la lealtad, el sacrificio, la austeridad, la disciplina, la abnegación y el espíritu benemérito son los principios clave que guían las actuaciones de los hombres y mujeres guardias civiles, y el férreo cumplimiento de estos compromisos ha permitido al Cuerpo garantizar la seguridad de la ciudadanía hasta nuestros días».

Y recuerda que «en la actualidad, ese espíritu benemérito se mantiene vigente de manera expresa en el Código de Conducta del personal de la Guardia Civil, cuyo artículo 21 exige a sus miembros prestar auxilio con los medios a su alcance a todo aquel que lo necesite, se encuentren o no de servicio, con especial atención a las personas y colectivos más vulnerables».

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