El diputado de Vox, Ignacio Hoces, dejó en evidencia al Partido Socialista durante el pleno en el Congreso de los Diputados de este martes, al ofrecer una lección de historia sostenida, incluso, con argumentos de historiadores próximos al partido que lidera el Gobierno. «Ustedes identifican a unos bandos de la contienda civil con la Segunda República y esto es una verdadera patraña, toda vez que el bando llamado republicano eran personas y partidos del Frente Popular, aliados con los separatistas y con los anarquistas», comenzó exponiendo el diputado del partido que lidera Santiago Abascal.
Hoces no dudó en hablar de algunos de los nombres más representativos de este periodo de la historia de España. «Niceto Alcalá Zamora, quien fuera presidente de la Segunda República por más tiempo durante los cinco años que duró, no se adhirió a ninguno de los bandos de la contienda civil», relató. «Alejandro Lerroux, prohombre del republicanismo español, fundador y líder del Partido Republicano Radical y también presidente del Consejo de Ministros durante varias etapas de la Segunda República, sí prestó su adhesión al general Franco, al igual que también lo hizo Santiago Alba, presidente de las Cortes de la Segunda República entre diciembre de 1933 y enero de 1936. Por no hablar de que también hubo diputados de la Segunda República que luego fueron ministros con el general Franco», añadió durante su intervención.
El diputado se dirigió hacia la bancada del PSOE para continuar con esta particular lección de historia que recibieron sus diputados. «¿Saben sus señorías del Partido Socialista cuántos ministros de la Segunda República murieron durante la Guerra Civil? Ocho o siete lo hicieron de manos del Frente Popular, que es el único bando que ustedes ensalzan y admiran. Siete de los asesinatos de ministros fue producido por el Frente Popular», expuso entre aplausos. «Son ustedes los que vienen aquí a hablarnos de historia a estas alturas. Pero, señorías del PSOE, tengan mucho cuidado con la historia, en particular con la historia de su partido. Porque la historia de su partido es una historia aterradora y criminal que está muy lejos de la democracia, de la paz y del respeto a la ley y el orden, sobre todo también durante la Segunda República», relató mientras los diputados socialistas presentes en el hemiciclo insinuaban no darse por aludidos.
Hoces recordó además algunas citas del fundador del Partido Socialista Obrero Español, Pablo Iglesias Posse. Una de ellas fue la que dice así: «La actitud del Partido Socialista con los partidos burgueses, llámense como se llamen, no puede ni debe ser conciliadora ni benévola, sino de guerra constante y ruda». «Una verdadera declaración de intenciones», reconoció. Para recordar la quema de iglesias durante la Segunda República y los crímenes contra religiosos, también se hizo eco de otra reflexión del fundador del PSOE que decía: «Queremos la muerte de la Iglesia. Para ello educamos a los hombres. Pretendemos confiscar los bienes. No combatimos a los frailes para ensalzar a los curas. Nada de medias tintas. Queremos que desaparezcan los unos y los otros». Durante su intervención también recordó las amenazas de Iglesias a Antonio Maura en esa misma Cámara.
Y terminó repasando el historial de Francisco Largo Caballero, «el llamado Lenin español, también presidente del Partido Socialista Obrero Español y consejero de Estado durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera» que «llamó a la Guerra Civil durante la Segunda República y para el que la República simplemente era una etapa intermedia para lograr la dictadura del proletariado, como ha demostrado entre otros historiadores el historiador socialista Santos Juliá», concluyó.