La asociación mayoritaria de la Guardia Civil denuncia a su exdirector Leonardo Marcos por dar chivatazos a la trama de Koldo

La asociación mayoritaria de la Guardia Civil, Jucil, ha denunciado a su exdirector Leonardo Marcos por dar chivatazos a la trama de Koldo que investiga la Audiencia Nacional. El Gobierno de Pedro Sánchez ha colocado recientemente a Marcos en la Embajada de España en Washington (Estados Unidos) como consejero con rango de diplomático.

En concreto, desde la asociación mayoritaria de los agentes se sostiene que Marcos, que dimitió tras sólo un mes en el cargo, participó en la trama de Koldo y se pide a los tribunales que le abran una investigación por la comisión de delitos de infidelidad en la custodia de documentos y violación de secretos.

Jucil se apoya en las revelaciones de los investigadores de la Unidad Central Operativa (UCO) encargados de investigar la red de corrupción donde también figuran el exministro José Luis Ábalos y el empresario Víctor de Aldama. Precisamente, estos agentes han relatado en varios informes que el comandante Rubén Villalba, que figura como imputado, sabía por Koldo García, asesor de Ábalos, que los miembros de la trama estaban siendo investigados.

Según las pesquisas de los agentes, Koldo, al mismo tiempo, era conocedor de estos hechos porque le informaba el propio Marcos. «Según el informe, en la llamada del 25 de enero de 2024, entre Rubén y Koldo, este último le confirmó que era la UCO quien se encontraba investigándoles, y que dicha información había sido otorgada por, en ese entonces, el Director General de la Guardia civil, quien le informó que existía una investigación abierta, contra quien y quien la estaba llevando», sostiene la denuncia.

«Es decir, el ahora denunciado, D. Leonardo Marcos, ex Director General de la Guardia civil, cuando aún se encontraba en el cargo, filtró a los investigados por comisiones de delitos de cohecho, tráfico de influencias, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal, que estaban siendo investigados», continúa.

De la misma manera, desde Jucil explican que el chivatazo de Marcos a la trama a través de Koldo fue clave para que la red pudiera destruir pruebas. «Les filtró dicha información, un mes antes de que fueran detenidas por esos hechos catorce personas, y se llevaran a cabo veintiséis entradas y registros, lo que les otorgó el tiempo suficiente para la ocultación de pruebas y/o sustracción/destrucción de las mismas», argumenta.

"Nos encontramos ante una infidelidad de custodia de documentos y una violación de secretos, los cuales eran conocidos por el Director General de la Guardia civil y fueron transmitidos a Koldo para que tuviera conocimiento de que la UCO, de la Guardia civil, le estaba investigando tanto a él como a las demás personas implicadas, hecho que provocó que la investigación ya no fuera secreta, y tras ese

conocimiento, todas las diligencias de investigación cortaban los cauces para obtener más prueba tanto documental como gráfica", concluye.