El PNV colocará frente a Intxaurrondo una placa en reconocimiento a una víctima de la «violencia policial»

Fue posiblemente uno de los casos más mediáticos y conocidos de los años 80, la desaparición y posterior muerte de Mikel Zabalza, un joven que fue detenido en una operación policial y veinte días más tarde apareció muerto a orillas del río Bidasoa, en el extremo norte de Navarra.

La versión oficial dice que Zabalza se escapó de la Guardia Civil cuando le llevaban por el monte para localizar un zulo con armas de ETA. La versión no oficial asegura que Mikel Zabalza no tenía relación con la organización terrorista y murió bajo las torturas a las que fue sometido en el cuartel de Intxaurrondo, el cuartel de la Benemérita en San Sebastián.

El Gobierno vasco ha decidido tomar por buena la versión no oficial y Mikel Zabalza fue reconocido como «víctima de la violencia policial», según la Ley 12/2016 de «reconocimiento y reparación de víctimas de vulneraciones de derechos humanos en el contexto de la violencia de motivación política en la Comunidad Autónoma del País Vasco entre 1978 y 1999».

Y por ese reconocimiento precisamente, este sábado el Ayuntamiento de San Sebastián colocará una placa justo enfrente del cuartel de Intxaurrondo en reconocimiento a Mikel Zabalza, lo que ha levantado ampollas entre las víctimas de ETA. Tanto la asociación Dignidad y Justicia como la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) han pedido por carta al alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, que no celebre este acto de homenaje.

«No está acreditado»

Para la AVT, la colocación de estas placas en recuerdo a las 'víctimas de la violencia policial' «son un instrumento más para hacer ver que aquí hubo dos bandos enfrentados y que hubo víctimas en ambos lados». Consideran que «en ningún caso se puede hablar de víctimas de violencia policial sino que, en aquellas circunstancias en las que se pueda probar que existió algún tipo de daño (que no es el caso), se podrá hablar de hechos aislados y puntuales realizados por algunos miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado», señala la presidenta de la AVT, Maite Araluce.

Dignidad y Justicia, asociación presidida por Daniel Portero, hijo del Fiscal Jefe de Andalucía, Luis Portero, asesinado por ETA, también ha pedido que no se celebre este acto de colocación de la placa por Mikel Zabalza. Para esta asociación, «existen datos extraídos de documentos de la propia organización terrorista ETA, que permiten invalidar la conclusión del precitado informe que da por acreditada la ausencia de relación de Mikel Zabalza con ETA».

Además, señala que la comisión que dictaminó que Mikel Zabalza era 'víctima de la violencia policial' «ha otorgado verosimilitud y valor inculpatorio a la versión dada, casi cuatro décadas después, por los otros detenidos, refiriendo haber sufrido torturas y malos tratos por parte de la Guardia Civil, durante el tiempo que estuvieron bajo su custodia, en clara contradicción con los datos objetivos obrantes en el procedimiento judicial».