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Fachada de la Audiencia NacionalPaula Argüelles

El juez del caso Ábalos interroga este lunes al jefe de la lucha antiyihadista que condecoró a Aldama

El juez que instruye el caso Ábalos en la Audiencia Nacional tomará declaración en calidad de testigos desde este lunes y hasta el martes a los agentes que aparecen vinculados en los informes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil con Rubén Villaba, el comandante investigado. Entre los ocho agentes declarará también el coronel Francisco José Vázquez, quien está al frente de la unidad contra el terrorismo yihadista, conocida UCE-2.

Precisamente este mando de la Guardia Civil condecoró al presunto conseguidor de la trama, Víctor de Aldama, asunto que ha desatado la polémica política y que ha provocado que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anuncie que hará lo posible por retirarle la medalla.

Estas citaciones de hasta ocho agentes llegan a raíz del análisis de la Fiscalía del informe de la UCO que se centraba en la figura de Villaba y su vinculación con De Aldama, al que la UCO describía como el «nexo corruptor» que conectaba «de manera premeditada y con intenciones claramente espurias» la administración estatal «con las estructuras societarias que operan bajo su control y dirección».

El informe de la UCO incluía «un conjunto robusto de elementos que evidencian el poder de De Aldama», dado que «logra infiltrar su presunta organización criminal dentro de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, valiéndose de la colaboración activa de Rubén» –Villalba–, el agente de la Guardia Civil destinado en Venezuela y que fue detenido en el marco del caso Ábalos.

Resaltan los agentes que Villalba habría recibido «una contraprestación económica –que podría ascender a más de 88.000 euros entre 2021 y 2023– cuya finalidad primordial era asegurar la protección y continuidad de la presunta organización criminal» mediante dos ejes.

Uno sería garantizando la seguridad interna u orgánica de los miembros, «que comprende la salvaguarda de sus comunicaciones y su seguridad personal», y otro sería garantizando la seguridad externa «protegiendo los actos de corrupción propios de la operativa delictiva».

En el informe se recoge una conversación de Villalba con quien era su jefe en la que éste trata de cerciorarse de que en los asuntos en los que han ayudado en materia de seguridad «no es para ninguna actividad criminal por parte de ellos». Villalba le explicó que no, que «es un tema de negocios».

En concreto, la UCO subrayaba que Villalba habría recibidos pagos tanto de De Aldama como de Koldo García, el exasesor del exministro José Luis Ábalos. Apuntaba que los pagos «en efectivo» arrancan en 2021 –la primera referencia que tiene la Benemérita es de mayo– y se extenderían hasta 2023, y añadía que ya en otro de sus atestados hablaban de pagos recurrentes de 2.000 euros.

Según la investigación de los agentes, esos pagos por parte de la presunta trama al guardia civil investigado coinciden en el tiempo con ingresos de efectivo en cuentas a su nombre. Esos ingresos, sostenía el informe, eran abonados en ocasiones por agentes subordinados del propio Villalba que «daba instrucciones» de a qué cuentas debían ingresar y el concepto.