Aldama señala a Torres y Armengol: «Había prisa. Ábalos habló con los presidentes de Baleares y Canarias»

La declaración en el Supremo de Víctor de Aldama, el empresario que está siendo investigado como presunto conseguidor de la trama de compraventa irregular de material sanitario que salpica al Gobierno, ha incluido a otros miembros del Ejecutivo, más allá de las acusaciones más graves que señalan al ex ministro José Luis Ábalos y su asesor Koldo García Izaguirre no sólo como receptores de pagos en efectivo sino como supuestos gestores de una presunta 'caja B' de financiación ilegal del PSOE.

Según ha podido saber El Debate, tras acceder al contenido íntegro de la comparecencia, Aldama volvía a a contestar a preguntas del magistrado instructor, Leopoldo Puente, para confirmar que en las operaciones de adquisición de mascarillas, en plena pandemia, para las comunidades autónomas de Baleares y Canarias, «fue Ábalos quien habló directamente» con los presidentes regionales, el actual titular de de Política Territorial, Ángel Víctor Torres y la hoy máxima responsable del Congreso de los Diputados, Francina Armengol.

De hecho, Aldama aseguró ayer ante el juez que, una vez cesado, le pidió a Ábalos que intercediese con el Gobierno Balear que, antes del cambio de signo tras las últimas elecciones autonómicas, inició la reclamación de una deuda al empresario relativa al material sanitario. «No era una deuda como tal», apostillaba Aldama, «sino que alegan un material defectuoso que no era tal».

Así las cosas, «esa gestión no se hizo a través de Koldo sino que fue Ábalos quien habló con Armengol y con Víctor Torres», directamente, sostuvo el empresario ante el magistrado Puente.

«Koldo era mi línea directa, pero a veces había prisa. Koldo estaría hablando con los subdirectores [de Sanidad de los gobiernos autonómicos] y le pidió en su despacho a Ábalos que hablase con la presidenta de Baleares», afirmó Aldama.

Algo similar a lo que pudo ser el proceder en el caso de Canarias, durante la Presidencia del actual ministro Ángel Víctor Torres con quien –en la declaración de la Audiencia Nacional– Aldama sostuvo que entabló «una relación personal». Se veían «en el Ministerio» [de Transportes], en «comidas, cenas» y «en una ocasión» Torres «estuvo en el piso de Atocha con Koldo», argumentó el empresario.

Cabe recordar que Aldama, con anterioridad, ya había señalado la supuesta implicación del socialista canario en la trama de 'mordidas' al desvelar que pagó el alquiler de tres pisos turísticos en el madrileño barrio de Atocha a los que, presuntamente, acudieron tanto Ábalos como Torres con «señoritas». Unas acusaciones que ambos se apresuraban a desmentir.

El ministro de Política Territorial también apareció durante la comparecencia del Supremo, en varios mensajes de Whatsapp que Aldama aseguró haber visto y en los que el socialista habría reclamado a Koldo 50.000 euros como comisión por la compra de las mascarillas.

«Yo no sabía de Torres pidiendo directamente, sino que se lo pidió a Koldo», reafirmaba Aldama que asegura tener los pantallazos reenviados de las conversaciones. El supuesto conseguidor no ocultaba su sorpresa ante semejante exigencia: «Era raro que lo pidiese antes de que los contratos [de las mascarillas] se tramitasen».

«Las mascarillas cuando llegaban a las administraciones se verificaban, pasaban un sistema, entre 7 y 8 días, se les asignaba unos colores de estado del trámite: primero rojo, luego verde, hasta que el interventor daba el visto bueno para pagar», relataba Aldama sobre el material de Canarias. «Ése tramite se lo saltaron. Ese trámite se aceleró y quedó constancia en los mensajes entre Koldo y Torres», remataba el empresario sobre la derivada autonómica de la trama.

Cuando más tarde empezaron las comprobaciones de la idoneidad del material adquirido, por parte de los Servicios de Salud competentes, y surgieron algunas incidencias, Aldama asegura que «Torres nunca se lo reclamó».