Sánchez recurre al «avance de la extrema derecha» para tapar el escándalo del fiscal general

En pleno escándalo por el borrado del contenido del móvil del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, además de las informaciones sobre los casos de corrupción que rodean al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez ha vuelto a recurrir este sábado a su discurso del «avance de la extrema derecha» cuyo discurso, según ha dicho, «copia» la «derecha tradicional».

Lo ha hecho desde Rabat, Marruecos, en su intervención en la apertura del Consejo Mundial de la Internacional Socialista, que preside. «Ahora ya no solo aceptan las premisas y los principios de la extrema derecha, sino que hacen algo peor: abrazan, copian esos discursos con ligeros cambios para que sean un poco más aceptables para el público», ha señalado aludiendo a la «derecha tradicional y más moderada».

Sánchez ha expresado que la «extrema derecha», cuyo avance, ha dicho, se ha acelerado, suele hacer uso de la tecnología para «expandir mentiras, con desinformación», y la ha acusado de «idealizar el pasado».

Más adelante también ha indicado que hay unas «élites» que quieren que crezca la «antipolítica» porque «es un atajo en su agenda real, una agenda reaccionaria –ha dicho– para debilitar la justicia social y desmantelar el Estado de bienestar», y ha sostenido que frente a ello ha señalado a la socialdemocracia como la «alternativa».

Su intervención llega después de que esta semana, como contó El Debate, la Guardia Civil confirmase que se ha borrado todo del teléfono incautado del fiscal general del Estado, imputado por presunta revelación de secretos. También después de que estos días atrás declararan la mujer de Sánchez, Begoña Gómez; la asistente de esta, Cristina Álvarez; el que fuera su número dos en el PSOE, José Luis Ábalos; y el comisionista de la trama Koldo, Koldo García.