El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en un acto de la Policía Nacional
Sube la indignación de policías y guardias civiles conforme aumentan las concesiones a nacionalistas de Sánchez
La inclusión verbal de los Mossos d'Esquadra en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ha sido la gota que colma el vaso
El artículo 2 de la Ley Orgánica 2/86 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad dice que «son Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado las dependientes del Gobierno de la Nación» y que «son Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (sin 'del Estado') los Cuerpos de Policía dependientes de las Comunidades Autónomas». El artículo 9 de la misma Ley ahonda asegurando que «Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ejercen sus funciones en todo el territorio nacional y están integradas por el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil».
Por eso sentaron especialmente mal las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuando el pasado viernes incluyó a los Mossos d'Esquadra dentro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para justificar el traspaso de competencias de inmigración a Cataluña.
Para la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), la afirmación de Sánchez para defender el acuerdo con el partido de Carles Puigdemont «no es un simple lapsus, sino un intento más de justificar cesiones políticas que, en la práctica, suponen el vaciamiento de competencias reservadas al Estado».
Desde la Policía, el Sindicato Unificado de Policías (SUP) también censuró las palabras de Sánchez. «El SUP quiere denunciar la estrategia manipuladora del presidente para sustraer las atribuciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en contra de la Constitución y en favor de sus socios independentistas», indicaron en un comunicado en el que criticaban las «mentiras» y el «malabarismo político» del jefe del Ejecutivo.
El sindicato Jupol metió el dedo en la llaga al preguntar «si todos somos Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ¿por qué existen agravios salariares que solo sufren Guardia Civil y Policía Nacional».
Y es que la inclusión verbal de los Mossos d'Esquadra en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado no es más que la gota que colma el vaso del hartazgo de policías y guardias civiles por las continuas concesiones de Pedro Sánchez a los nacionalistas.
Tal y como explicó la portavoz de Jucil en Cataluña, Mila Cívico, en palabras a El Debate, «nos están echando de Cataluña por la puerta de atrás».
Pero este hartazgo no se limita únicamente a las concesiones a los independentistas catalanes. La entrega de puertos y aeropuertos vascos a la Ertzaintza, los primeros en recibir esta cesión de una competencia que hasta ahora era exclusiva del Estado, también ha exasperado a los guardias civiles. Incluso hasta el punto de que los oficiales de la Benemérita han denunciado la entrega.
Porque hace menos de tres meses, también fue la entrega de las competencias de Tráfico en Navarra a la Policía Foral, una petición histórica del nacionalismo vasco que sueña con no ver a la Guardia Civil en las carreteras navarras tras su expulsión de las vascas en 1984 y de las catalanas en 1998.
Manifestación el día 12
De ahí que la inmensa mayoría de las asociaciones y sindicatos policiales hayan convocado una concentración frente al Congreso de los Diputados este próximo miércoles a las 12 del mediodía.
La convocatoria de este miércoles se centra en la entrega de Inmigración a Cataluña, pero a ningún sindicato policial o asociación de guardias civiles se le escapa que el hartazgo viene de más lejos y de más territorios.