PP y Cs señalan a María Jesús Montero como responsable política de las corruptelas en la Faffe

El Partido Popular y Ciudadanos han expuesto, este jueves, sus conclusiones sobre la comisión de investigación de la Faffe, que ha finalizado después de tres años de trabajo en el Parlamento de Andalucía. La comisión ha servido para determinar que la actual ministra de Hacienda, otrora consejera de Salud y de Hacienda de la Junta, María Jesús Montero, es responsable política de las presuntas corruptelas que cometió el PSOE en el organismo público que se fundó para gestionar los fondos destinados a la formación de los parados andaluces. Al igual que los expresidentes Manuel Chaves, José Antonio Griñán y Susana Díaz, según el PP, aunque Cs descarta la implicación de Díaz.

La formación naranja exculpa a Susana Díaz porque cuando ella llegó a la Presidencia de la Junta de Andalucía, la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo —más conocida por su acrónimo, Faffe— ya se había disuelto e integrado en el Servicio Andaluz de Empleo (SAE). A juicio de Ciudadanos, la hoy senadora por designación autonómica, al contrario que Chaves y Griñán, «no ha sido la precursora ni la ideóloga ni continuó con el desmadre de la Faffe».

No piensa lo mismo el Partido Popular que incluso ha pedido la dimisión de Díaz. En la Faffe se aplicó «el manual de la corrupción socialista de los Gobiernos de Andalucía», una «corrupción de alto voltaje», asegura el PP-A. «No son cuatro golfos; la corrupción en la Faffe, los ERE y los cursos de formación tiene un denominador común: el PSOE de Andalucía», añade.

«La Faffe fue impulsada, tolerada y protegida por los Gobiernos socialistas de la Junta de Andalucía, y sus presidentes eran conocedores de todo lo que ocurrió; fueron pasivos en la persecución de la corrupción y, por tanto, cómplices», manifiestan los populares, que señalan a María Jesús como otra responsable política. La exconsejera andaluza, ahora ministra de Hacienda, sería la culpable «de que los expedientes de reintegro sobre subvenciones que se dieron a la Faffe y no se justificaron bien sumen 115 millones de euros».

El PP-A dice que «la Faffe no desapareció en 2011», sino que «sigue existiendo», ya que los expedientes se están tramitando; Ciudadanos, que «nunca debió existir», y lo califica como «el caso de corrupción más inmoral e indecente de la historia de la democracia». Los populares apuntan asimismo a Juan Espadas, pero para que, como secretario general del PSOE de Andalucía, pida responsabilidades a Montero y Díaz. Los naranjas, por su parte, destacan el papel del que fuera director general del ente, Fernando Villén, como protagonista de los desfalcos.