Moreno se abraza al andalucismo y fija por decreto el Día de la Bandera: el 4 de diciembre

Juanma Moreno ha abrazado el andalucismo. Literalmente, además. Esto levanta ampollas en la izquierda, en perpetuo intento de patrimonializar los símbolos autonómicos, sobre todo la bandera, dado que, en muchos casos, la enseña nacional causa urticaria; pero también en la derecha, que no quiere más movimientos regionalistas en España.

El andalucismo centró la comparecencia del presidente de la Junta de Andalucía ante el Pleno del Parlamento autonómico este jueves. La portavoz de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, preguntó a Juanma Moreno sobre el Día de la Bandera de Andalucía.

Según reveló Moreno, el Consejo de Gobierno andaluz aprobará un decreto ley por el cual se establecerá el 4 de diciembre como el Día de la Bandera de Andalucía, una jornada en la que se celebrarán actividades educativas, institucionales y culturales. El dirigente autonómico anunció también que se declarará Bien de Interés Cultural (BIC) el Círculo de Artistas de Ronda, donde tuvo lugar la Asamblea donde se adoptaron las insignias de la bandera y el escudo de Andalucía.

Un andalucismo transversal

Teresa Rodríguez recordó al presidente de la Junta que su grupo, Adelante Andalucía, presentó en 2016 y 2020 sendas leyes para el reconocimiento institucional del 4-D y fueron rechazadas. Además, apuntó que sus «referentes andalucistas» son su madre y sus hijas y que defiende un andalucismo «de las cosas de comer» y no «oportunista». Juanma Moreno le respondió que su andalucismo «transversal, capaz de unir a personas que piensan de manera distinta».

La portavoz de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, afirmó que el dirigente autonómico hace «una cosa muy transversal», y es que «reparte sonrisas»; pero no inspecciona a las empresas que «especulan con los precios y engañan a los consumidores andaluces». «Su andalucismo no puede ser el de dar la crónica de lo que sucede en Andalucía», le espetó Nieto a Moreno, que, a su vez, le reprochó que no defendiera la autonomía andaluza del «ataque visceral» del Gobierno de España por la decisión de bajar los impuestos.

Andalucía no necesita más simbología ni solemnidadManuel GaviraPortavoz de Vox en Andalucía

Por su parte, el portavoz de Vox, Manuel Gavira, estableció una comparación entre Pedro Sánchez y Juanma Moreno. Mientras el primero «desvía la atención de la ruina de España» con la Ley Trans, la Ley de Memoria Democrática y la corbata, el segundo hace lo propio con la oficina andaluza en Cataluña, el Día de la Bandera de Andalucía y el tatuaje respecto a la realidad de la región, que sufren especialmente los jóvenes, «que llevan escritas en la frente dos palabras: precariedad e incertidumbre».

«Los andaluces somos andaluces y, por supuesto, también españoles —le contestó un ‘rajoyesco’ Moreno—, y eso es la esencia y lo positivo que tiene nuestra tierra, que, a diferencia de otras comunidades autónomas nunca hemos entrado en ningún conflicto». El de Vox indicó que «Andalucía no necesita más simbología ni solemnidad. Andalucía necesita valentía para hacer políticas diferentes en esta tierra».

Preguntado por las políticas de empleo joven, el dirigente autonómico mencionó las leyes, planes, programas y medidas económicas de educación, empleo y vivienda para los jóvenes de Andalucía. Asimismo, anunció que en los presupuestos de 2023 se incluye un programa de activación del empleo joven con una dotación de más de 70 millones de euros. No sería el último anuncio de Moreno en esta sesión de control.

Moreno anunció que el 57 % del presupuesto autonómico para 2023 irá destinado a gasto social

Del lado socialista, Juan Espadas cuestionó el andalucismo de Juanma Moreno y también su política económica: «Según el día se disfraza de una cosa: un día le da por disfrazarse de andalucista y corre a la caza de figuras históricas para rellenar un currículum que su partido desde luego no tiene, y otro día se disfraza de milagro económico y se va a Barcelona y les dice a los CEO que se vengan para Andalucía». Además, le reprochó su gestión de los fondos europeos.

Al final, el presidente aprovechó su turno de dúplica contra el líder de la oposición para anunciar que el 57 % del presupuesto autonómico para 2023 irá destinado a gasto social. A sanidad se destinarán 1.350 millones de euros más, y alcanzará la «cifra récord» de 13.800 millones en inversión sanitaria, un 11 % más. La partida de educación crecerá 1.127 millones, hasta los 8.514, un 15 % más. En servicios sociales se movilizarán 340 millones más. Además, los presupuestos incluirán 5.500 millones de fondos europeos.