Miembros de Por Andalucía sostienen carteles de Inma Nieto (IU) y Juan Antonio Delgado (Podemos) en el acto de inicio de campaña del 19-JIU Andalucía

Andalucía

Podemos marca distancias con IU de cara a las municipales

El partido morado supedita cualquier alianza electoral al cumplimiento del acuerdo de Por Andalucía y a la prevalencia de su marca, a pesar de su escasa implantación territorial

A cinco meses y medio de las elecciones municipales del próximo mes de mayo, y a pocos más de las generales, la relación entre Podemos e Izquierda Unida dista mucho de ser el «ejemplo de confluencia» que prometía el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, cuando ambas formaciones sellaron su alianza en Andalucía, allá por 2017. Las negociaciones para concurrir de la mano a las municipales están abiertas, la experiencia autonómica de Por Andalucía complica una coalición para mayo de la que también formaría parte Más País.

La desconfianza es mutua y a saber si insalvable. El recuerdo de cómo se fraguó Por Andalucía está muy presente. De momento, Podemos marca distancias con Izquierda Unida y supedita cualquier otra alianza electoral al cumplimiento del acuerdo que suscribieron particularmente ambas organizaciones para presentarse juntas a los comicios del pasado 19 de junio, según el cual los morados ostentarían la única portavocía adjunta del grupo y el puesto de la Mesa del Parlamento.

Sin embargo, la líder de Por Andalucía, Inma Nieto (IU), en consonancia con un pacto en el seno de la coalición, propuso en septiembre que Esperanza Gómez (Más País) fuera también portavoz adjunta del grupo, de forma que Juan Antonio Delgado (Podemos) comparte dicho cargo con ella desde entonces. Podemos ya tenía conocimiento de la futura propuesta el 1 de agosto, dado que recibía las actas de las reuniones de la coalición, pese a que sus miembros no asistían.

Tensión en Por Andalucía

En una reciente entrevista en el programa Acento Andaluz, de 7TV Andalucía, Juan Antonio Delgado reclamó la vuelta de la diputada morada Alejandra Durán a la Mesa del Parlamento, después de que Inma Nieto la relevara por la representante de Más País y portavoz adjunta, Esperanza Gómez, por una «quiebra de confianza» hacia Podemos, que intentó imponer el mismo mes de septiembre un reglamento interno del grupo que le beneficiaba. Los morados quisieron vengarse así de la ‘traición’ de Izquierda Unida.

Se da la circunstancia de que de los cinco diputados de Por Andalucía, tres son de Podemos: Juan Antonio Delgado, Alejandra Durán y José Manuel Gómez. Por ello, los morados, que figuraron como independientes en las listas electorales, exigen también, por un lado, acceder al dinero que entra en el grupo parlamentario, y por otro, que la marca Podemos prevalezca en una nueva coalición con Izquierda Unida y Más País. «En la papeleta tiene que estar el nombre de Podemos», afirmó en esta entrevista Delgado.

La implantación territorial

Por su parte, Izquierda Unida presume de implantación territorial, de lo que carece Podemos y motivo, a su juicio, para liderar la marca que resulte de un posible acuerdo con el partido morado. A nivel municipal, ellos son la fuerza hegemónica a la izquierda del PSOE y sacarán músculo presentando listas completas en el 90 % de los municipios andaluces, «abiertas a quien quiera sumarse», apuntan, aunque sin conceder a Podemos la condición de socio preferente.

Los números avalan la postura de Izquierda Unida, que en las elecciones municipales de 2019 logró más de 60 alcaldías y casi un millar de concejales: 455 en solitario y otros 524 bajo la marca Adelante Andalucía, compartida inicialmente con Podemos. Por su parte, el partido morado apenas obtuvo 83 actas de concejal por su cuenta, y algunos, no saben cuántos exactamente, tras la implosión de Adelante, se pasaron a las filas de los Anticapitalistas de Teresa Rodríguez, que tiene la intención de presentar lista en las ocho capitales andaluzas.

Por de pronto, Podemos presentará candidatos en 81 de los 785 municipios de la comunidad; es decir, en apenas el 10 % del territorio, aunque al menos lo hará en todas las capitales de provincia, que representan el 58 % del censo. Esta cifra contrasta con las 291 candidaturas del partido morado –con sus siglas o bajo la marca Adelante Andalucía–, frente a las 435 de Izquierda Unida, para las municipales de 2019.