PP y PSOE se retan a conquistar las ocho diputaciones andaluzas el 28-M con la incógnita de Vox

El nuevo año trae consigo nuevos propósitos, y tanto el PSOE como el PP se han propuesto para 2023 teñir de sus respectivos colores –unos, de rojo; otros, de azul– el mapa de Andalucía el próximo 28 de mayo, en las elecciones municipales. Un objetivo que el tercer partido a niveles nacional y autonómico, Vox, aspira a torpedear sobre todo desde la provincia de Almería.

Los comicios que se celebraron el pasado 19 de junio están muy presentes en el inicio de la precampaña de las municipales en Andalucía, aunque los socialistas intentan no mirar al pasado. En esta última ocasión en la que los andaluces acudieron a las urnas, el mapa de la región se tiñó de azul, algo inaudito aquí, en el que fuera el feudo por antonomasia de los del puño y la rosa.

El PSOE, además de cosechar, por segundas elecciones consecutivas, su peor resultado histórico en unas andaluzas, tuvo que ver cómo el PP de Moreno Bonilla vencía por mayoría absoluta, algo inimaginable cuatro años atrás, cuando se iniciaba la crisis del socialismo andaluz. Los del puño y la rosa se aferran desde entonces a su arraigo municipal, liderados ahora por alguien que fuera alcalde, concretamente de Sevilla, como Juan Espadas como su secretario general.

Altas expectativas

Por su parte, la mayoría absoluta que lograran en las autonómicas del 19-J espolea a los populares de cara a la cita con las urnas del 28-M. Tanto es así que persiguen el reto de 'sumar' ocho más ocho; es decir, auparse a las alcaldías de las ocho capitales de provincia y presidir las ocho diputaciones provinciales.

Explican desde el PP andaluz que su objetivo es, en definitiva, equilibrar el poder territorial en Andalucía, donde el PSOE y sus socios de Gobierno a nivel nacional –Izquierda Unida y Podemos– gobiernan el 70 % de los municipios. «Nosotros no llegamos ni al 20 %», apuntan. Los populares se fijan gobernar en el 50 % (casi 400) de los ayuntamientos andaluces como meta para los próximos comicios locales y se ven con opciones de ganar en las ocho capitales de provincia.

Para esto último, el PP lleva a cabo una profunda renovación de sus candidatos, con seis nuevos aspirantes. Actualmente, los populares gobiernan en Almería, Córdoba y Málaga. En la capital almeriense, será candidata María del Mar Vázquez, que sustituyó a Ramón Fernández-Pacheco en la Alcaldía después de que éste fuera nombrado consejero del Gobierno andaluz. El alcalde cordobés, José María Bellido, y el malagueño, Francisco de la Torre, son los únicos que repiten como cabezas de lista respecto a las municipales de 2019.

Los populares hacen su principal apuesta en Granada, donde su candidata será la todavía consejera de Fomento, Marifrán Carazo. En Huelva presentarán a Pilar Miranda, la actual presidenta del Puerto onubense, y en Jaén, al director general de Consumo de la Junta de Andalucía, José Agustín González Romo. A diferencia de en Sevilla, donde José Luis Sanz se postuló como alcaldable a falta de 600 días para las elecciones, en Cádiz aún no hay candidato confirmado.

Reforzar su poder territorial

El PSOE acepta el reto del PP y se cree capaz incluso de mejorar los resultados que obtuvo el 26 de mayo de 2019. Hoy por hoy, tiene 4.209 concejales a lo largo y ancho del territorio andaluz y ostenta las alcaldías de 459 de los 785 municipios de Andalucía. Además, y en consecuencia, preside seis de las ocho diputaciones, todas excepto Almería y Málaga.

El objetivo de la organización del puño y la rosa de cara al 28-M es reforzar su poder territorial, manteniendo así los bastones de mando de las cuatro capitales de provincia que gobierna y conquistar Málaga, donde en 2019 Daniel Pérez se quedó a tan sólo un concejal de derrocar a De la Torre, y Cádiz, cuya Alcaldía deja un personaje como el 'Kichi' (Adelante) y donde el PP, como se ha dicho, todavía no tiene candidato y partiría, por ello, con desventaja en la carrera electoral. Motiva especialmente la capital de la Costa del Sol, feudo del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno.

Antes de finalizar 2022, los socialistas ya habían nombrado a sus alcaldables en las capitales de provincia. A los regidores de Sevilla, Antonio Muñoz; Granada, Paco Cuenca; Huelva, Gabriel Cruz, y Jaén, Julio Millán, ya confirmados de antemano, se unían los vencedores de las primarias de Almería, Adriana Valverde; Cádiz, Óscar Torres, y Córdoba, Antonio Hurtado, y el secretario general del PSOE de Málaga, Daniel Pérez.

Juan Espadas ya se ha reunido con sus secretarios provinciales para definir la estrategia de aquí a las municipales. Por lo general, los alcaldes socialistas de Andalucía gozarán de autonomía en la (pre)campaña; él se encargará de hacer campaña en contra de Juanma Moreno, con el riesgo que ello supone para el líder del PSOE andaluz tras lo ocurrido el 19-J. No obstante, la estrategia de Ferraz se centra en las grandes ciudades, como Sevilla, donde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presenta este sábado la candidatura de Antonio Muñoz.

La incógnita

En cuanto a Vox, el partido de Santiago Abascal renueva a seis de sus ocho cabezas de lista en las capitales de provincia de Andalucía para el 28-M. Sólo repiten los candidatos que presentó hace cuatro años en Huelva, Wenceslao Font, y Sevilla, Cristina Peláez. Sus seis nuevos alcaldables son Beatriz Sánchez, en Granada; Juan Francisco Rojas, en Almería; Francisco Miguel Martín, en Cádiz; Antonio Alcázar, en Málaga; Manuel Ureña, en Jaén, y Yolanda Almagro, en Córdoba.

El objetivo de Vox es crecer en estos puntos lo suficiente como para condicionar posibles gobiernos del PP. A tal efecto, la formación conservadora, que, ya asentada en las instituciones, medirá su fuerza a nivel municipal, recurre a candidatos de perfil profesional y con experiencia de gestión y, en la mayoría de los casos, como concejales durante el actual mandato. En estos momentos, no tiene representación ni en el Ayuntamiento de Cádiz ni en el de Málaga.