El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en la redacción de El DebatePaula Argüelles

El Gobierno de Moreno saca pecho por las rebajas fiscales: 1.944 millones más de recaudación al año

La Junta recaudó 7.776,89 millones más entre 2019 y 2022 que en el cuatrienio 2015-2018

La Junta de Andalucía ha recaudado una media de 1.944 millones de euros más al año desde que Juanma Moreno llegó al Palacio de San Telmo, en enero de 2019, respecto a la última etapa de gobierno socialista, según un informe de la Consejería de Economía, Hacienda y Fondos Europeos.

En total, entre 2019 y 2022, la recaudación tributaria homogénea en Andalucía fue de 68.769 millones de euros, frente a los 60.992,1 recaudados entre 2015 y 2018. Esta cifra representa un 12,75 % más de recaudación tributaria. Este porcentaje se traduce en un incremento de los ingresos tributarios de 7.776,89 millones de euros más en los últimos cuatro años en comparación con los cuatro anteriores, lo que arroja una recaudación media anual de 1.944,22 millones más entre 2019 y 2022 que en el periodo 2015-2018.

El 57,46 % del incremento total de recaudación se explica por el comportamiento del tramo autonómico del IRPF, en el que la Junta de Andalucía ejerce competencias normativas, bajando la tarifa autonómica. La recaudación creció 4.468,4 millones de euros entre 2019 y 2022 frente al cuatrienio 2015-2018, lo que representa un 25,03 %.

La recaudación de la modalidad de transmisiones patrimoniales onerosas, sobre la que la Junta ha ejercido sus competencias normativas estableciendo tipos reducidos y mayores beneficios fiscales para la adquisición de la vivienda habitual, se incrementa en 765,90 millones de euros en el período 2019-2022 respecto a 2015-2018, lo que supone un aumento de la recaudación homogénea del 18,73 %.

Asimismo, la recaudación de la modalidad de actos jurídicos documentados, para la que se han establecido tipos reducidos y mayores beneficios fiscales para la adquisición de la vivienda habitual, muestra un incremento de 211,74 millones en el último cuatrienio respecto al anterior, con un aumento de la recaudación homogénea del 13,92 %.

Las sucesivas bajadas de impuestos llevadas a cabo en Andalucía perseguían frenar la marcha de contribuyentes a otros territorios y mejorar la eficacia de la recaudación, haciendo aflorar la economía sumergida, que antes no tributaba. En este sentido, sirve de ejemplo el comportamiento de las declaraciones del impuesto de sucesiones y donaciones tras la bonificación del 99 % del gravamen para cónyuges y parientes directos. El número de donaciones se ha multiplicado por más de cinco, y el importe de la base imponible, casi por ocho, a pesar de que el importe total ingresado haya disminuido en este capítulo, como efecto, precisamente, de la bonificación.

Las bajadas de impuestos

Desde 2019, el Gobierno andaluz ha bajado todos los impuestos sobre los que tiene alguna capacidad normativa. Así, en IRPF se han bajado la tarifa y los tipos, aumentado las deducciones e incorporado muchas que no existían, y se han deflactado los primeros tramos de tributación y los mínimos exentos (aunque los efectos de esta última medida aún no se contemplan en los datos cerrados de recaudación, pues la liquidación del ejercicio 2022 aún no se ha realizado).

También se ha bonificado el impuesto de sucesiones y donaciones y el de patrimonio. Por cada euro que Andalucía ha dejado de ingresar por sucesiones y donaciones, ha ingresado diez por el incremento de la recaudación en IRPF, debido al aumento del número de contribuyentes. Los datos del gravamen patrimonial aún se han contabilizado.

Respecto a los ingresos por el impuesto de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados (ITP-AJD), éstos se han incrementado un 18,73 % y un 13,92 %, respectivamente, en el cuatrienio 2019-2022, lo que supone un aumento de la recaudación sólo por este concepto de casi 1.000 millones de euros (977,65 millones), pese a que se han bajado los tipos aplicables.

En 2022, Andalucía alcanzó la cifra de recaudación por el ITP-AJD más alta desde 2007, justo antes de la crisis inmobiliaria: 1.842,85 millones de euros. Estos números se corresponden con un mayor dinamismo en el mercado inmobiliario de la comunidad autónoma, favorecido por la política fiscal desarrollada en la región, en relación con la media de España.