La sequía en Doñana: ¿hay agua para los regadíos del condado de Huelva?

Andalucía atraviesa la peor sequía de los últimos 30 años; una circunstancia que esgrime entre tantas la izquierda para oponerse al plan del PP y Vox para regularizar regadíos en el Condado de Huelva, en el entorno de Doñana. Pero ¿son compatibles la actual situación de sequía y la proposición de ley que pretenden aprobar los grupos del centro-derecha en el Parlamento andaluz?; ¿hay agua para los regadíos en cuestión?

Según Vox, serían necesarios apenas cuatro hectómetros cúbicos (hm³) de agua para regar las 750 hectáreas que, calculan, podrían quedar legalizadas gracias a la aprobación de la proposición de ley que aún se tramita en el Parlamento andaluz para la mejora de la ordenación de las zonas agrícolas del Condado de Huelva ubicadas en los términos municipales de Almonte, Bonares, Lucena del Puerto, Moguer y Rociana del Condado.

Esta agua llegaría a la comarca a través del trasvase desde la demarcación hidrográfica de los ríos Tinto, Odiel y Piedras hasta la del Guadalquivir. Para ello es fundamental el desdoblamiento del túnel de San Silvestre, una de las obras comprometidas en la ley del trasvase de 2018. Esta norma contempla la transferencia de 19,99 hm³ de una a otra cuenca, con el objetivo de sustituir las zonas regables que se abastecen directamente del acuífero de Doñana por agua superficial.

«El desdoblamiento del túnel de San Silvestre es un proyecto clave para asegurar la capacidad de transporte del sistema de abastecimiento de los municipios del Condado de Huelva, así como para mejorar la estabilidad del riego en la provincia, aportar recursos a usos industriales, facilitar la recuperación de los acuíferos de la zona y apuntalar el equilibrio hídrico del entorno, en especial del Parque Nacional de Doñana», reconocía el Gobierno de España en la autorización de esta obra.

¿Cuánta agua hay?

Según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica, los embalses andaluces han perdido 58 hm³ en los últimos siete días, bajando hasta los 2.967 (el 26,5 % de su capacidad). 14 hm³ del vaciado semanal proceden de la cuenca del Guadalquivir, que conserva 1.957 (24,4 %); 5 hm³, de la Cuenca Mediterránea Andaluza, que se ha quedado con 413 (35,2 %), y los 39 hm³ restantes provienen de los pantanos del Guadalete-Barbate (Cádiz), que almacenan ahora 442 (26,8 %).

En cambio, los embalses de la cuenca Tinto-Odiel-Piedras, en Huelva, se mantienen con 155 hectómetros cúbicos de agua, al 67,7 % de su capacidad. Esta cuenca ha presentado históricamente excedente hídrico, de ahí las reivindicaciones de los regantes, recogidas en la proposición del ley del PP y Vox. Huelva, con 621 hm³ (41,2 %) es la provincia andaluza que mejor situación hídrica atraviesa de las ocho que conforman el mapa de la región.

Según la lógica de Vox, bastaría un 3,2 % del agua superficial que almacena la cuenca onubense de los ríos Tinto, Odiel y Piedras para abastecer los regadíos en cuestión. Agua hay, a pesar de la sequía; lo que no hay son infraestructuras para su trasvase ni un plan de ordenación del territorio acorde con la realidad de la comarca del Condado de Huelva.

En este sentido, cabe señalar que la ley de regadíos no otorgaría derechos de agua, puesto que ello es competencia de las administraciones hidrográficas; simplemente permitiría recalificar los regadíos que fueron declarados no aptos en 2014, con base en una planimetría de 2004. Sería el primer paso para poder optar al agua superficial que llegue gracias al trasvase. Se trata de una cuestión de ordenación del territorio, no en vano se implica a la Consejería de Fomento.