Felipe VI recibe el premio Alberto Jiménez-Becerril por su apoyo a la víctimas del terrorismo

Su Majestad el Rey Felipe VI ha recibido este viernes el IX Premio contra el Terrorismo Alberto Jiménez-Becerril «como reconocimiento al apoyo que el monarca siempre ha mostrado hacia las víctimas del terrorismo».

Además, en su primera visita al Ayuntamiento de Sevilla, donde se ha celebrado el acto de entrega del galardón, el Rey ha firmado en el libro de honor y ha recorrido las diferentes estancias de la Casa Consistorial, acompañado del alcalde, José Luis Sanz; el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha destacado el hito de acoger por primera vez al Rey en la Casa Consistorial y ha repasado la relación de la Casa Real con la capital hispalense. «Hoy estamos escribiendo una página más de esa historia entre Sevilla y los reyes con la presencia de Felipe VI en el ayuntamiento de todos los sevillanos, que le agradecemos con satisfacción por su cercanía e implicación con la ciudad de Sevilla», ha afirmado el regidor hispalense.

Del mismo modo, Sanz ha expuesto que del triste recuerdo del asesinato del concejal sevillano Alberto Jiménez-Becerril y su esposa, Ascensión García Ortiz, a manos de ETA, ha surgido un acto de firmeza, unida, justicia y libertad contra el terrorismo. «Esa esquina de la calle Don Remondo no fue el final, sólo el principio de la derrota de los que hablaban con las pistolas. Desde Sevilla entendimos que nunca podíamos ceder al chantaje y la extorsión de los terroristas, porque Alberto y Ascen nunca lo hubieran querido», ha asegurado el regidor hispalense.

Posteriormente, el presidente de la Fundación Alberto Jiménez-Becerril, el hijo mediano del matrimonio asesinado por ETA, Alberto, ha expresado el «tremendo orgullo» que para su familia supone que el Rey haya aceptado el premio que lleva el nombre de su padre el año en el que se han cumplido 25 años del asesinato de sus progenitores. «En un aniversario tan especial hemos querido que el premiado fuese la persona más especial posible», ha manifestado.

Alberto Jiménez-Becerril García ha fundamentado la concesión del galardón al Rey en «su compromiso con las víctimas de la barbarie terrorista sufrida en España», como demostró, ha relatado, en su primera audiencia como monarca, dedicada a ellas, pero también como príncipe de Asturias.

Memoria, dignidad y reconocimiento

Por último, Felipe IV ha agradecido la concesión de un premio que, ha dicho, quiere compartir con todos los españoles porque es «un reconocimiento para el conjunto de nuestra sociedad, una sociedad que ha sufrido el terror pero que siempre confió en la dignidad de las víctimas, en la solidaridad de todos los españoles y en la fortaleza del Estado de derecho para hacer frente con eficacia al terrorismo».

El Rey también ha recordado en su discurso que aquel desgraciado 30 de enero de 1998, cuando los terroristas asesinaron a Alberto y Ascen, él cumplía 30 años. «Un día que se cubrió de una profunda tristeza para mí, pero muy especialmente para sus familias y toda la sociedad española, que, al igual que había hecho seis meses antes tras el secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco, volvió a llenar las calles», ha señalado.

El discurso del monarca ha sido de constante reivindicación del reconocimiento a las víctimas del terrorismo. «A ellas les debemos tres valiosas palabras: memoria, dignidad y reconocimiento. Es una responsabilidad de todos mantener su legado y defender los derechos de los que fueron privados», ha concluido.

A su llegada al Ayuntamiento de Sevilla, Felipe VI ha sido recibido entre aplausos y vivas por alrededor de 300 personas que se habían congregado en Plaza Nueva.