Granada
Flores, música y 'ley seca' vuelven a tomar las calles de Granada en su tradicional Día de la Cruz
Este año la festividad se celebrará, de nuevo, los días 3 y 4 de mayo y no contará con barras de bebidas y comida en las calles
Granada se prepara estos días para la llegada de una de sus fiestas tradicionales más esperadas, el Día de la Cruz. Claveles, habas, «salaillas», rebujito, música en directo y cruces llenarán la capital y algunos municipios granadinos.
El Día de la Cruz de Granada se inicia oficialmente el día 3 de mayo, a las 12:00 horas, con la lectura del pregón oficial ,que este año estará a cargo de Iván Centenillo y se celebrará en el Patio del Ayuntamiento. A lo largo de esta ceremonia se hará entrega de los premios del concurso oficial de Cruces de Mayo 2024, en el que este año participarán un total de 48 cruces repartidas entre 9 calles y plazas, 25 patios, 9 escaparates y 14 colegios.
En esta ocasión, el Ayuntamiento ha prohibido la instalación de puestos de bebida y comida en las calles para proteger la festividad y la liturgia. Por tanto, sólo las cruces que se encuentren en recintos cerrados podrán ofrecer bebida y comida al público.
Desde el Ayuntamiento han resaltado que «la festividad del Día de la Cruz se ha convertido ya en una seña de identidad de la ciudad de Granada y en un referente al que acude gente de diferentes zonas de España y del extranjero. Por lo que, desde el Ayuntamiento se promueve una serie de iniciativas para fomentar esta festividad tradicional y cultural de nuestra ciudad»
Origen de la festividad
El día 3 de mayo se conmemora en muchos países del mundo el Día de la Santa Cruz, instituida en el siglo IV. Esta tradición popular hunde sus raíces en un hecho religioso y tiene sus orígenes en Jerusalén.
Según se cuenta, por el siglo IV el pagano Constantino tenía que enfrentar una terrible batalla contra el perseguidor Majencio. La noche previa al suceso, Constantino tuvo un sueño en el que vio una cruz luminosa en los aires y escuchó una voz que le dijo «con este signo vencerás». Santa Elena, madre del emperador, pidió permiso a su hijo y fue a Jerusalén a buscar la Santa Cruz en la que Cristo murió.
Al empezar la batalla mandó colocar la cruz en varias banderas de los batallones y exclamó: «Confío en Cristo en quien cree mi madre Elena». La victoria de Constantino fue total, se convirtió en emperador y dio libertad a los cristianos.
A Granada llegó un pedazo de la supuesta cruz de Cristo al albayzinero convento de Santa Isabel la Real. Según cuenta la leyenda, un viernes de Cuaresma las monjas de este convento escucharon como salían voces de una pared. Mandaron derribarla y encontraron dentro del muro un pedazo de la cruz de Cristo. Desde entonces, en el convento se sigue la costumbre de que una de las monjas de la comunidad se llame Sor María de la Cruz.