Almería
Otra localidad almeriense se declara en rebeldía y rechaza acoger más inmigrantes enviados desde Canarias
El alcalde de Adra se resiste a otro centro de acogida, que significaría el cuarto de la provincia
La localidad almeriense de Adra (Poniente Almeriense, 25.000 habitantes), se ha sumado a la rebelión encabezada por El Ejido a la hora de acoger más inmigrantes en su municipio de los que traslada el Gobierno desde Canarias.
El alcalde de la localidad, Manuel Cortés (PP) ha trasladado su rechazo a la apertura de un centro de acogida que se situaría en el Hostal Zapata, zona de La Curva, y que constituiría el cuarto recinto de este tipo en la provincia.
El primer edil abderitano ha recibido una llamada por parte del subdelegado del Gobierno en Almería, José María Martín, en la que ha le comunicado que desde la Secretaría de Estado de Migraciones «se prevé abrir un centro de estas características en la localidad».
Este centro se añadiría a los otros tres ya existentes hasta ahora y que son los hoteles habilitados en la zona de El Toyo, en la capital, y en Roquetas de Mar, así como el recurso habilitado en El Ejido, el cual también ha contado con el rechazo del alcalde de la localidad, Francisco Góngora (PP).
Cortés ha expresado su «profundo malestar» por la «total opacidad» que, según ha aseverado, ha mantenido el Gobierno de España «actuando de espaldas al Ayuntamiento en un asunto que es trascendente para la totalidad del municipio».
«El Gobierno de España sólo se ha puesto en contacto con nuestro Ayuntamiento después de que haya saltado la noticia a través de la prensa», ha lamentado el alcalde, quien ha calificado este hecho de una «enorme deslealtad institucional con la administración más cercana a los abderitanos y abderitanas».
Alta presión migratoria
El alcalde ha mostrado también su «total desacuerdo» con la política «errática» de inmigración del Gobierno de Pedro Sánchez y ha recordado que tanto su municipio como otros de la zona ya sufren «una alta presión migratoria».
La implantación de estos centros, según el alcalde, «es contrario al modelo de acogida e integración social que se lleva desarrollando en el Poniente almeriense durante muchos años» por lo que cree que el Gobierno de España «está creando un enorme desequilibrio en materia migratoria».
«Expresamos nuestra disconformidad con la instalación de este tipo de centros porque es nuestro sentir y el que nos ha trasladado la mayoría de nuestros ciudadanos. Este tipo de centros se deben construir desde la convivencia y no desde la fractura social. El Gobierno no ha contado ni con el Ayuntamiento ni con la sociedad abderitana», ha dicho.
Asimismo, ha recordado que «en nuestro municipio, además, tenemos problemas adicionales relacionados con la llegada masiva de pateras a nuestras costas a través de organizaciones relacionadas con el tráfico de personas».
«Desde el Ayuntamiento hemos solicitado en varias reuniones a la subdelegación del Gobierno que intensifique los medios humanos y materiales para combatir el problema de las narcolanchas que llegan a nuestras costas con total impunidad», ha manifestado antes de cuestionarse «si esta es la respuesta» a sus demandas.
Decisión paralizada
Según una nota, tras recibir una llamada del subdelegado del Gobierno en Almería, José María Martín, el primer edil ha acogido con «satisfacción», pero con «cautela», esta noticia porque «nos encontramos en un periodo electoral» y espera que «no se trate de una maniobra política».
Cortés ha subrayado que en este asunto «tenemos que ser totalmente transparentes con los abderitanos y abderitanas» y que, «al igual que en el día de ayer informé de la confirmación de la noticia por parte del Gobierno, hoy quiero trasladar a la ciudadanía que el subdelegado del Gobierno se ha puesto en contacto conmigo para comunicarme que, en este momento, se ha paralizado la decisión».
Fuentes del Gobierno han confirmado a EFE que, efectivamente, se ha paralizado temporalmente este traslado, aunque no han precisado el motivo de la decisión.