Dos personas observando la Alhambra de Granada desde el mirador de San NicolásEFE

Granada

Granada es la provincia donde más tiempo se respira aire contaminado de toda España

El principal factor que agrava la mala calidad del aire es la orografía del terreno, que favorece la acumulación y el estancamiento de los gases contaminantes

Infecciones respiratorias, enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y cáncer de pulmón son solo algunas de las consecuencias para la salud que los expertos diagnostican a causa de inhalar cada día, sin remedio en el corto plazo, aire contaminado.

Según el último informe sobre la calidad del aire de Ecologistas en Acción, casi 33 millones de españoles estuvieron expuestos en 2023 a unos niveles de contaminación que exceden los nuevos límites aprobados para 2030 por el Parlamento Europeo. Los tres contaminantes más problemáticos en España son las partículas en suspensión, el dióxido de nitrógeno proveniente del escape de vehículos motorizados; y el ozono troposférico.

Granada es la segunda ciudad española con peor calidad del aire y la primera capital de Andalucía más contaminada, según los últimos informes recogidos por la Agencia Europea de Medioambiente. En esta provincia se recogen de media 14,1 microgramos por metro cúbico de unas partículas PM 2,5, que principalmente son dióxido de nitrógeno, y que son perjudiciales para la salud. El límite que estableció la Organización Mundial de la Salud, como indicativo de una calidad del aire muy desfavorable, es de de 15 µg/m3 de partículas PM 2,5 de media diaria. Un límite que Granada roza.

Los factores favorecen mala calidad aire

Entre los principales factores que agravan la mala calidad del aire en la provincia se encuentran: la invariable orografía del terreno y la ubicación geográfica. La ciudad de Granada y su área metropolitana están situadas en una depresión y en un valle, que están rodeados de montañas de entre 1.000 y 3.350 metros de altura, lo que favorece la acumulación y el estancamiento de los gases contaminantes por el difícil acceso de las rachas ventosas.

Los niveles más altos de partículas contaminantes se suelen registrar en verano, cuando se producen los episodios de polvo sahariano impulsados por los vientos del sur. En esos episodios concretos, el aire es más pesado y no deja que los gases se liberen hacia la estratosfera.

Otro factor determinante es la elevada cantidad de desplazamientos con vehículos privados que se produce diariamente en la capital. Un total de 215.058 granadinos admite que va a trabajar en su vehículo personal, según la Encuesta de Características Esenciales de la Población y las Viviendas publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este dato representa al 63,28% de los ciudadanos de toda la provincia.

Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, la contaminación del aire debería abordarse como un problema sanitario de primer orden, ya que en 2021 fallecieron prematuramente hasta 21.000 personas en España por enfermedades agravadas por la mala calidad del aire, 10.000 de ellas en episodios de alta contaminación, según el Instituto de Salud Carlos III.