El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, pensativo ante su audienciaEuropa Press

Granada

El ninguneo del ministro Óscar Puente a las autoridades locales y autonómicas en su visita a Granada

Acude a la ciudad para participar en un coloquio, pero rehúsa entrevistarse con la alcaldesa y con la consejera de Fomento para abordar los problemas ferroviarios

Todos sabemos que los ministros son gente muy ocupada. Sin embargo, también entendemos que un cargo de tan alta responsabilidad debe saber organizar su apretada agenda para atender adecuadamente las necesidades más urgentes de los ciudadanos, que al fin y al cabo son los que sostienen con sus impuestos todo el entramado político de un país democrático como el nuestro.

El ministro de Transporte y Movilidad Sostenible ha vuelto a sembrar la polémica en su visita a Granada. Óscar Puente, que tiene previsto hoy viernes participar en un coloquio sobre «El futuro de las infraestructuras», organizado por el periódico local Ideal, no se reunirá finalmente con la alcaldesa de la ciudad ni con los responsables de la Junta de Andalucía en la materia, pese a que Marifrán Carazo asegura que le solicitó «hace ya un año» una entrevista al ministro, que después ha vuelto a pedir en repetidas ocasiones, sin obtener por ahora una respuesta afirmativa ni fecha alguna.

La semana pasada, al tener noticias de la visita del ministro a Granada, la alcaldesa volvió a solicitar, una vez más, una reunión con Óscar Puente para acercar posturas en temas de vital importancia para la ciudad, como el soterramiento de las vías del AVE a su entrada a Granada o la mejora de las conexiones ferroviarias. Sin embargo, fuentes ministeriales han confirmado que el ministro carece de tiempo en su agenda para reunirse con la alcaldesa de la ciudad o con la consejera de Fomento, Rocío Díaz, durante su breve estancia en Granada.

Caos ferroviario y promesas incumplidas

La consejera ha lamentado también que el responsable de la cartera de Transporte y Movilidad Sostenible no haya tenido la debida «lealtad institucional» para programar al menos un primer encuentro con las autoridades locales y autonómicas para abordar temas urgentes como el caos ferroviario que ha sufrido Andalucía este verano, con graves retrasos y cancelaciones por parte de Renfe; así como los problemas urgentes que tiene planteados Granada en materia de infraestructuras, particularmente ferroviarias.

Aunque ha asegurado que la Junta está «con la mano tendida» para dialogar con el Gobierno nacional, ha pedido a Puente un compromiso claro, que se refleje en los presupuestos del Estado, tal y como ya han hecho la Junta y el Ayuntamiento desde el año pasado.

La lista de retrasos e incumplimientos ferroviarios del Gobierno español con Granada es considerable. Hasta cuatro proyectos de profundo calado para el desarrollo del transporte por ferrocarril han sufrido graves retrasos o están directamente en «vía muerta».

En primer lugar, la variante de Loja está en marcha desde hace doce años y ninguno de los tres tramos de la obra está concluido. Se trata de una obra esencial para reducir la duración del AVE de Granada a Madrid, que actualmente iguala o incluso supera al mismo viaje realizado en autobús de línea. El segundo incumplimiento con Granada es el tren Guadix-Baza-Lorca, una línea indispensable para las comarcas del norte de la provincia, que sigue sin iniciar sus obras más de dos años después de su anuncio. En tercer lugar, la conexión Granada-Motril, fundamental para el despegue del puerto motrileño y para el desarrollo económico de la costa, sigue «durmiendo el sueño de los justos». Finalmente, también sigue parada la eterna promesa incumplida del soterramiento de las vías del AVE a la entrada de la capital.