Esta enfermedad tiene una alta incidencia en la comarca de la Sierra de Segura.Getty Images/iStockphoto

Jaén

El insomnio familiar fatal causa la muerte de 40 miembros de una misma familia y se ceba con la provincia de Jaén

Es una enfermedad hereditaria para la que de momento no hay cura y de alta incidencia en el entorno de la Sierra de Segura

El insomnio familiar fatal es una enfermedad hereditaria que causa un gen que pasa de padres a hijos y que provoca el fallecimiento de las neuronas, concentrándose en el área del cerebro donde se regula el sueño. Por ello, quienes la sufren tienen muchas dificultades para poder conciliar un sueño profundo.

Solo en la zona de la Sierra de Segura, en Jaén, han fallecido al menos 40 personas de una misma familia. La mayoría de los fallecidos tenían entre 20 y 50 años, y desarrollaron esta enfermedad para la que de momento no hay cura.

El cuerpo se queda sin descanso

En la actualidad, la mayoría de los afectados se concentran concretamente en Cortijos Nuevos, uno de los pueblos con más incidencia de este gen mortífero. «Cinco hermanos de mi padre han fallecido por esta enfermedad», aseguraba, ante las cámaras de Canal Sur, Pilar Muñoz. «No se llega a la fase de sueño total, por lo que el cuerpo pierde la capacidad de descansar», añade Juani Sánchez, Presidenta de la Asociación Insomnio Familiar Fatal.

Un análisis genético es la prueba que permite conocer si se ha desarrollado este gen. Teniendo en cuenta que es algo hereditario, es una situación que entre muchas familias donde ha habido casos cuestiona la idoneidad de tener hijos. Al parecer, la reproducción asistida sería a día de hoy la única forma de evitar que los descendientes hereden ese fatídico gen.

El insomnio familiar fatal es una enfermedad hereditaria que afecta principalmente una parte del cerebro llamada tálamo, que controla el ciclo sueño-vigilia y que ayuda a las diferentes partes del cerebro a comunicarse entre sí.

Los primeros síntomas de insomnio familiar fatal comienzan generalmente entre las edades de 32 y 62 años (media de 51 años), pero puede comenzar tan temprano como a los 18 años.

No todo el mundo con la enfermedad tiene insomnio como el primer síntoma principal. Otros síntomas pueden incluir ataques de pánico, miedos inexplicados (fobias), pérdida de peso, falta de apetito, y tener una temperatura corporal demasiado baja o demasiado alta (hipotermia, hipertermia).